Mariló se despide de TVE: «Salud y suerte»

«Esta es mi hora de cierre, en este minuto. Por ahora, aquí concluye mi ciclo en TVE. Salud y suerte», con esas palabras se despedía ayer Mariló Montero (Estella, Navarra, 1965) de 'La Mañana de La 1', después de siete temporadas al frente del magacín matinal. Minutos después, el ente público confirmaba que la presentadora y subdirectora abandonaba definitivamente el programa, al que llegó en agosto de 2009 y del que siempre había sido su rostro principal. Silvia Jato tomará las riendas a partir de hoy, en principio como sustituta de verano, aunque no se descarta que se quede. Otro nombre que suena con fuerza para septiembre es el de el Maxim Huerta .

Mariló se marcha, pero no lo hace para tomarse un año sabático. Como ella misma ha confesado, su etapa en el canal «podría haberse alargado por deseo de TVE. Pero necesito cazar sueños que aún tengo por ahí». Es más que probable que cadenas como Telecinco la tengan en cuenta para futuros proyectos. Sin duda, este año ha sido duro para la periodista. Para empezar, la audiencia de su programa se ha movido en torno a un 6-7% de 'share' durante la última temporada, a bastante distancia de las otras 'reinas' de la mañana, Ana Rosa (Telecinco) y Susanna Griso (Antena 3).

Además, los rumores sobre su salida del Ente Público han sido constantes. Y tuvo que pedir la baja por una enfermedad que la alejó de la parrilla en junio de 2015. A esta lista de desdichas hay que sumar el «acoso laboral» que ha sufrido por parte de Elena Sánchez Pérez, directora del formato y con la que ha tenido varios desencuentros por los contenidos del magacín. Una acusación que la denunciada tachó de «desproporcionada».

Mariló cobraba por cada programa de 'La Mañana' 600 euros, cuando el coste total de la emisión era de 49.000, según los datos de la última auditoría pública, que es de 2014 y que añadía que esa temporada tampoco se alcanzaron los objetivos de audiencia. El sueldo de la presentadora no era nada para los 13.000 euros que recibía por cada entrega de 'El pueblo más divertido de España', una aventura de TVE en el 'prime time' de hace dos veranos y que fracasó .

Polémicas

Aunque siempre se ha mostrado impermeable a las críticas, Mariló no ha podido evitar estar en el ojo del huracán por una serie de comentarios polémicos que han puesto patas arriba las redes sociales. Uno de sus editoriales más recordados estuvo dedicado a los trasplantes de órganos: «¿Alguien querría recibir el pulmón, el hígado, el corazón de otro que ha quitado vidas? No está científicamente comprobado, pero nunca se sabe si ese alma está también trasplantada en ese órgano».

También demostró su falta de tacto en el caso de Asunta Basterra, la niña asesinada en 2013 en A Coruña, con este comentario: «Si acababa de ser asesinada, todavía estaría blandita». Un año después, la volvía a pifiar al hablar sobre la esquela de la cría: «La firma un tal Q.E.P.D». La imprudente Mariló no ha parado de hacer enemigos: aseguró que el olor del limón podía prevenir el cáncer y tildó de «fiesta maravillosa» el Toro de la Vega. La verdad es que ha dado mucho juego.

Silvia Jato se hará cargo del programa en verano y podría quedarse si las audiencias responden. La cadena también ha sondeado a Maxim Huerta, excolaborador de Ana Rosa, que aún no ha dado una respuesta.