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El recipiente, a bordo del camión que lo trasladó a Irun. E. R.
Retirada la segunda de las seis tinajas del siglo XVI halladas en la Parte Vieja

Retirada la segunda de las seis tinajas del siglo XVI halladas en la Parte Vieja

El recipiente, que fue trasladado a las instalaciones de Gordailua en Irun, resultaba un obstáculo para construir el foso del ascensor del portal

B. O.

SAN SEBASTIÁN.

Jueves, 1 de enero 1970

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La segunda de las seis tinajas de aceite del siglo XVI halladas la semana pasada en el subsuelo de un portal de la Parte Vieja de San Sebastián fue retirada y trasladada ayer para su custodia a las instalaciones de Gordailua de Irun. Los seis recipientes de barro fueron hallados en el curso de unos trabajos para instalar un ascensor en el portal número 4 de la calle San Lorenzo, que está a dos pasos de la plaza de La Bretxa. Cuando los operarios que realizaban la obra vieron la boca de una de las tinajas asomar en la superficie del hueco que excavaban para instalar el foso del elevador, dieron aviso del hallazgo a Aranzadi, encargada de supervisar las obras al estar la Parte Vieja declarada zona de interés arqueológico.

Después de retirar la arena y la tierra que cubrían las vasijas, los especialistas determinaron que estaban ante unas piezas muy parecidas a otras que aparecieron diez años atrás en unos trabajos que se llevaron a cabo en La Bretxa. A partir de esa evidencia, concluyeron que se trataba de unos recipientes fabricados en el siglo XVI en Andalucía que se utilizaban como depósitos de grasa de ballena, también conocida como saín, y de aceite de oliva. En los últimos años han aparecido en las inmediaciones de La Bretxa varias tinajas de similares características, lo que ha llevado a los especialistas a considerar que en el perímetro de lo que es hoy la plaza se concentraban los comercios dedicados a los productos relacionados con el aceite y los combustibles en la época previa al incendio de 1813.

«Hubiésemos tenido que partirla por la mitad para hacer el encofrado del foso»

Las otras cuatro vasijas de barro se quedarán en el subsuelo del portal

La primera de las tinajas se situaba en la mitad del hueco destinado a acoger el foso del ascensor, así que fue necesario retirarla en una operación no exenta de dificultades. Los recipientes tienen unas dimensiones considerables -más de 1,50 metros de altura y 1,10 metros de diámetro- y un peso superior a los cien kilos. Técnicos del departamento de Cultura de la Diputación y de Aranzadi lograron extraer la primera vasija el viernes con la ayuda de los operarios que trabajan en la construcción del ascensor.

La maniobra, que requirió casi dos horas de trabajo, fue un éxito y el recipiente salió finalmente a la luz sin sufrir un solo rasguño. La tinaja fue trasladada a bordo de un camión a la sede de Gordailua, el depósito de los restos arqueológicos que la Diputación de Gipuzkoa tiene en Irun.

Molestias por el retraso

Se pensó inicialmente que las otras cinco tinajas no iban a obstaculizar la construcción del elevador, pero en una comprobación posterior se constató que no era así. «Había una segunda tinaja que se interponía en el espacio destinado al foso», comentaron ayer a este periódico los operarios de las obras. «Como había que partirla por la mitad para hacer el encofrado, se avisó a Aranzadi, que decidió que también había que retirarla. Esperemos que sea la última porque los vecinos del portal empiezan a estar molestos por el retraso de los trabajos del ascensor». La aparición de las vasijas ha provocado cierta preocupación en el vecindario en la medida en que puede alargar el plazo de la obra, que en principio se estableció en unos cuatro meses. «Llevo quince años esperando que pongan el ascensor porque tengo mal la rodilla, así que espero que todo se arregle cuanto antes», manifestó la semana pasada uno de los vecinos del cuarto piso

La segunda tinaja fue retirada a media mañana de ayer. Se encuentra, como la que se extrajo la semana pasada, en excelente estado de conservación. Un camión la trasladó a Gordailua, donde será sometida a un exhaustivo análisis para determinar si, como apuntan todos los indicios, pertenece a la misma época que las halladas en la zona de La Bretxa con anterioridad.

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