
Nisa Goiburu | Artista
«Vi que aquí no tenía ninguna posibilidad porque el arte vasco era muy masculino»Secciones
Servicios
Destacamos
Nisa Goiburu | Artista
«Vi que aquí no tenía ninguna posibilidad porque el arte vasco era muy masculino»Con más de medio siglo de trayectoria creativa a sus espaldas, la artista multidisciplinar Nisa Goiburu (Ordizia, 1946) protagonizó el pasado viernes una «charla performativa» ... en la galería Arteuparte de Donostia, en la que repasó una carrera marcada por el reconocimiento en el exterior y la sensación de eclipse en un mundo vasco dominado por las grandes figuras masculinas.
– ¿En qué momento le ha llegado la propuesta de Arteuparte?
– En un momento tranquilo, relajado en el que no me lo he pensado. Además, he hecho bastantes charlas de este tipo. En Madrid, cuatro en sólo un año. Además, cuando te hacen la propuesta, la cabeza te empieza a funcionar y una vez que me había comprometido, debía hacerlo.
– Me refería más bien a en qué momento de su carrera artística. ¿Está activa o en un impasse?
– Siempre estoy activa, con mayor o menor intensidad. Ahora, no con la de antes, ahora voy más tranquila porque ya he hecho tanto que piensas que es el momento de vivir un poco.
– Más en su caso, en el que ha practicado pintura, fotografía, escultura, poesía, danza... ¿Ha sido por una búsqueda de su propio lenguaje o porque necesitaba tocar muchos palos?
– Porque todo lo llevaba en el germen que llevo dentro. Desde muy pequeña me he sentido atraída por todas esas actividades. La primera vez que junté esas disciplinas, que fue en 1999 en la exposición 'Arte Simbiosis' en el Palacio Aramburu de Tolosa, se me metió ya que quería hacer lo que me permitiera abordar el mismo tema desde distintas disciplinas. Vi que quería aunar todas las artes. Colaboraron conmigo el músico Agustín González Arcilu, la soprano Esperanza Abad y el bailarín José Antonio Beguiristain. Fue algo que impactó muchísimo a la gente porque entonces no se hacían estas cosas.
– Sin embargo, los inicios de su trayectoria se remontan a 1966. ¿Cómo ha cambiado el panorama artístico vasco desde entonces?
– Le tengo que hablar desde mi posición de mujer.
– Claro.
– Era un mundo muy masculino. Todo lo que he conseguido ha sido por mí y fuera de aquí. He ido a Nueva York con mi dossier en la mano y a Japón, por unas fotos que vieron, pero no aquí, sino con una marchante de Barcelona. Aquí no he tenido muchas facilidades.
– ¿Se ha sentido eclipsada por ese panorama tan masculino?
– Me cuesta decirlo, pero sí. E insisto: me cuesta mucho decirlo.
– ¿Por qué?
– Pienso que son las circunstancias y si busqué fuera se debió a que vi que en el País Vasco no tenía ninguna posibilidad. En todos los lugares en los que me he presentado fuera del País Vasco he podido hacer algo. En Madrid, Jaén, Barcelona...
– ¿Ha cambiado la situación de la mujer artista en este tiempo?
– Sigo la actualidad, no hay más que ver cuántos grupos de mujeres salen y se valoran mucho. Y hace poco, un grupo de creadores a los juegos de rol me llamaron para utilizar de portada un cuadro mío. Eran gente muy joven, con una mentalidad completamente distinta a la mía. Eso me gusta mucho porque el arte es atemporal.
– O sea, que sí ha cambiado la situación.
– Esperemos que cambie un poco más, todavía falta mucho.
– ¿Le cuesta encontrar sitios para exponer en la actualidad?
– Hace dos años hice cuatro exposiciones en doce meses, pero en sitios alternativos. En Bizkaia, en los pabellones de coches históricos Retromobile de Erandio, con unas paredes enormes y a donde llevé mucha obra. En la inmobiliaria Araxes también expuse. Se trata de llevar el arte a otros públicos porque las galerías se cierran porque ya no va gente. Es una oportunidad de mostrar arte a personas que no van a las galerías. Y las cuatro tuvieron muy buena acogida.
– Conoció desde muy joven a los grandes nombres del arte vasco: Oteiza, Chillida, Ameztoy, Basterretxea...
– A Chillida, menos. Coincidimos en 1999 en Japón porque estaba en el mismo hotel.
– ¿Cuál de todos ellos le ha marcado más?
– Jorge Oteiza. Fueron tardes muy intensas artísticamente. Fue el primero que denominó 'realismo mágico' a la obra que yo estaba haciendo. Analizaba y estudiaba las obras de una forma que me sobrecogió.
– ¿Hay algún tema que atraviese toda su trayectoria?
– Una característica mía ha sido la unión de lo orgánico y lo orgánico en mis cuadros. He incluido mucha geometría, pero lo que más me ha movido ha sido la naturaleza. Y aunque durante una época no incluí muchas figuras humanas, sí que he reflejado los desengaños que he sufrido con algunas gentes.
– ¿Por qué esa atracción por la naturaleza?
– La vegetación, las rocas. Me gusta tanto un bosque como un desierto porque en cada uno encuentro una forma de transmitir.
– ¿Qué reto le queda por cumplir?
– Yo es que no me pongo retos. La creatividad surge. Cuando me preguntan qué leo para inspirarme, siempre contesto que a mí me gusta leer después de crear la obra. Y cuando encuentras una conexión entre tu obra y lo que estás leyendo es cuando sientes una anchura terrible en el alma. A través de la intuición quemas etapas. Normalmente cuando empiezas no sabes lo que estás haciendo y no es hasta que has avanzado bastante cuando descubres la idea que te ha movido. Y cuando lo agotas, cambias de etapa.
– Hablaba de atraer a nuevos públicos. ¿Qué es una «charla performativa»? La expresión puede asustar más que atraer...
– Fue un coloquio en el que repasé mi trayectoria y las dificultades que he encontrado para llegar hasta aquí. Se dice muy fácil que he expuesto en Japón, Nueva York, París o Londres, pero fue un esfuerzo muy grande. Si en Nueva York me hubieran dicho que mi obra no valía, hubiese colgado los pinceles porque esta vida es muy dura. En la 'charla performativa' leo una poesía narrativa de mi obra y a continuación, hago una puesta en escena del tema del que estemos hablando.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
El mejor restaurante de comida sin gluten de España está en Valladolid
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.