Víctor Pablo Pérez: «Hay tendencias cainitas que espero que no se produzcan en la música sinfónica»
Director de orquesta ·
El maestro burgalés dirige al Orfeón Donostiarra y a la Euskadiko Orkestra esta tarde en el auditorio del KursaalEl maestro burgalés Víctor Pablo Pérez es uno de los directores más queridos en San Sebastián. Esta tarde se reencuentra con el público donostiarra en ... el auditorio del Kursaal, así como con dos instituciones con las que mantiene una fructífera relación, el Orfeón Donostiarra y la Euskadiko Orkestra, para un concierto muy especial.
Publicidad
– San Sebastián, Quincena Musical, Orfeón Donostiarra y Euskadiko Orkestra. ¿Cómo vive este reencuentro con tantos compañeros y amigos?
– Con mucha ilusión, porque he comprobado, además, que tanto el Orfeón como la orquesta están muy renovados. Estos últimos ocho años en Madrid he tenido la oportunidad de hacer audiciones para orquesta de muchos instrumentos y cada vez aprueban más músicos españoles. Las nuevas generaciones han tenido un progreso sensacional. Y esto es evidente en las orquestas jóvenes, en las que se ve que los músicos tienen un nivel de preparación intenso y amplio.
– Habrá sido difícil comprobar esta evolución desde que se desencadenó la pandemia. ¿Cómo ha vivido esta situación?
– Afortunadamente, yo he tenido mucho trabajo. Para mí ha sido un año de reflexión activa. En esa reflexión entraban infinidad de variables, desde repetir un concierto varias veces para dar cabida al público anterior a la situación, como para ver qué tipo de programas se podían hacer para mantener viva la llama del mundo sinfónico.
PROGRAMA HOY
-
Euskadiko Orkestra /Orfeón Donostiarra. Auditorio del Kursaal, 19.30 horas.
-
Quinteto Iyoko Terraza del 4º piso de Tabakalera. 20 horas.
-
Dúo Cassadó Torre-Palacio Orgaz (Lantaron). 19 horas.
-
Liana Gourdjia-Josu Okiñena. Iglesia de Campezo, 19.30.
– Casi todas las orquestas optaron por hacer un repertorio pensado para una agrupación reducida.
– No es mi caso. Yo decidí que no había que interpretar solo música del Barroco o del Clasicismo, pensada para orquestas pequeñas. La historia nos ha enseñado que hace un siglo, en el periodo entre la Primera y la Segunda Guerra Mundial, cuando los teatros estaban destruidos, las orquestas diezmadas y no había instrumentos ni partituras, la Sociedad Privada de Conciertos de Schoenberg apostó por seguir interpretando sinfonías de Beethoven, Bruckner o Mahler con orquestas reducidas, e incluso crear obras para estas formaciones. He tomado esto como ejemplo y durante este año he dirigido conciertos con la 'Primera' o la 'Novena' de Mahler o la 'Séptima' de Bruckner.
Publicidad
– Y a nivel personal, ¿cómo ha vivido la situación generada por el Covid?
– A nivel personal viví el confinamiento con mi hija y mi familia cercana. Lo pasé estudiando, tranquilo y sobre todo pensando en qué íbamos a poder hacer el día después del confinamiento.
«No hay que dar una plaza de orquesta al músico que toca mejor el día de la prueba, sino al que tiene conciencia de grupo»
Selección
– En el concierto de esta tarde interpretan el único oratorio que compuso Beethoven 'Jesús en el monte de los olivos'. ¿Cuáles son sus principales alicientes?
Publicidad
– Posee una intensidad desconocida. Es la gran pasión de Beethoven, no es solo la de Cristo, sino la pasión del propio Beethoven, que expresa el calvario que sufre en un momento en el que no solo le han detectado la sordera, sino que le han hecho muchas pruebas sin resultado. Beethoven se encuentra en un momento de frustración y angustia impresionantes. Uno de los datos que más pueden corroborar esto es el tratamiento de la orquesta con continuos cambios dinámicos, diferentes tempos... En cuanto al tratamiento coral, tiene una parte para coro mixto propia de los oratorios, pero hace un tratamiento casi operístico del coro de hombres.
– Con toda esa fuerza expresiva y siendo de Beethoven, ¿por qué cree que se programa tan poco?
– No lo sé. Aunque sea una obra desconocida y poco programada es una de las grandes obras de Beethoven y además termina de una forma muy brillante, que se ha comparado con el 'Alleluia' de Haendel.
Publicidad
– Se suele afirmar que la música vocal de Beethoven no es nada agradecida para los cantantes. ¿Diría que este oratorio es una obra difícil para ellos? ¿Y para la orquesta?
– Es más difícil para los solistas que para el coro, para el que la obra está muy bien escrita. Es especialmente complicada para la soprano, con notas sobreagudas difíciles, y para el tenor. Para la orquesta es una obra intensa que exige de una concentración absoluta por los cambios que hay casi cada dos compases.
– Previamente interpretarán dos obras: las 'Letanías a la Virgen Negra' de Poulenc y la 'Misa de los Pescadores' de Fauré, piezas que tampoco son conocidas para el gran público. ¿Por qué las ha incluido en el programa?
Publicidad
– Son obras complementarias y todas son de música religiosa. La 'Misa de los pescadores' es una misa de verano, escrita originalmente para órgano y coro femenino. Es muy sutil. En cuanto a la obra de Poulenc, es una de las más bellas y serias que ha podido escribir. No tiene nada de esa frivolidad que suele tener la música de este compositor; es muy reflexiva y está escrita en un momento en el que Poulenc se convierte al catolicismo después de la muerte de un amigo en accidente. Son dos obras, además, sumamente apropiadas para las mujeres del Orfeón Donostiarra por el tipo de color que tienen.
«Lo peor que le puede pasar a una orquesta o a un auditorio no es que mueran, sino que se les ahogue»
Futuro
– ¿Cuáles son sus principales objetivos al dirigir estas obras como director invitado?
Noticia Patrocinada
– Cuando diriges como invitado, intentas aprovechar lo mejor que recibes de los músicos en los días que estás con ellos. Cuando eres titular, mi planteamiento es hacer un proyecto de futuro que tiene que basarse en detalles.
– Ha sido titular de la Orquesta Sinfónica de Tenerife y la de Galicia durante cuarenta años y en los últimos ocho, de la Orquesta de la Comunidad de Madrid, compromiso que finaliza este mes. ¿Tiene en mente asumir la titularidad de alguna otra orquesta?
Publicidad
– Ahora mismo no. No descarto nada, pero no lo tengo en mente y creo que una relativa temporada sin titularidad puede ser muy enriquecedor.
– ¿Sobrevivirán todas las orquestas a la crisis pos-pandemia?
– Sí, sin duda. Nuestro país tiene tendencias cainitas, pero espero que no se produzcan en la música sinfónica. No obstante, hay que estar muy alerta. A principios del XIX y finales del XX en España se crearon muchas bandas municipales y se inauguraron muchos teatros a la italiana. Hoy en día esas bandas de música están dejadas de la mano y los teatros a la italiana están sufriendo mucho porque no tienen dinero para programar. A finales del XX se crearon dos docenas de orquestas sinfónicas y unos treinta auditorios y hay que vigilar que no se les deje morir. Esperemos que no nos suceda lo que pasó hace un siglo.
Publicidad
– ¿A qué se refiere?
– Lo peor que le puede pasar a una orquesta o a un auditorio no es que mueran, sino que se les ahogue, es lo peor. Espero que no ocurra. Veo en la situación general política un empeño en seguir adelante, pero también hay que hacer un impulso grande por parte de los gestores, e incluso de los propios músicos, de ofrecer nuevas ideas para conseguir que las orquestas sean útiles para toda la sociedad, no solo para una parte de ésta.
Suscríbete los 2 primeros meses gratis
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión