Euskadiko Orkestra valora su gira por Polonia como «un punto de inflexión en su carrera internacional»
La formación sinfónica dirigida por el maestro Robert Treviño actuará esta tarde en Katowice en el que será su concierto fin de gira
«Podemos decir que hemos establecido una importante relación con el Festival Beethoven y que hemos sellado ya la posibilidad de volver en un futuro». ... Así se ha referido el director general de Euskadiko Orkestra, Oriol Roch, a la experiencia que la formación sinfónica vasca ha vivido esta semana en su primera gira por Polonia. Tras su estreno en Varsovia y su paso por Wroclaw y Cracovia, esta tarde (19:30) pondrán el broche de oro con un último concierto frente a los 1.800 espectadores que acogerá la sede de la Orquesta Sinfónica de la Radio Nacional Polaca (NOSPR).
Publicidad
A lo largo de sus 41 años de vida, Euskadiko Orkestra ha llevado en su ADN una vocación internacional que les ha llevado a diversos países europeos y tierras sudamericanas, pero esta nueva salida europea, la número 22, ha supuesto según la institución «un punto de inflexión en su carrera internacional». Polonia es ejemplo de tradición musical con mayúsculas, cuna de grandes artistas, compositores y orquestas centenarias, y el Festival Beethoven, al que la orquesta ha sido invitada fruto de su relación con el director titular Robert Treviño, se ha convertido en uno de los más importantes de Polonia.
La expectativa por recibir a la orquesta ha quedado reflejada en la excelente respuesta del público, con 5.400 entradas vendidas a lo largo de las cuatro ciudades de la gira. En palabras de Treviño, «los músicos tienen enormes dosis de pasión, poder y entusiasmo. Han tocado cuatro veces ante muchísima gente y se han volcado en lograr el mejor sonido y profundidad en la interpretación. Todo esto me hace sentirme muy orgulloso de ser director titular de Euskadiko Orkestra, que ha demostrado encontrarse en un altísimo nivel».
Tradición y modernidad
Las salas que la orquesta ha visitado han sido una combinación de tradición y de modernidad. Varsovia y Cracovia representan lugares históricos, el primero reconstruido tras la Segunda Guerra Mundial, el segundo de paredes centenarias, y los dos cargados de historia de grandes compositores e intérpretes, leyendas que han tejido la historia musical de Polonia y que hacen que vivamos hoy su tradición con absoluto respeto y admiración.
Publicidad
Por su parte, los auditorios de Wroclaw y Katowice son lugares también de gran relevancia levantados con posterioridad, en arquitectura de vanguardia, con las mejores acústicas y convertidas en las mejores salas de conciertos, dicen, del mundo entero. Por estas salas ha pasado Euskadiko Orkestra, marcando «un nuevo hito internacional y haciendo honor a su condición de embajadora cultural vasca».
Será precisamente en Katowice donde la orquesta despida hoy su gira. Una ciudad industrial de tradición minera que alberga uno de los auditorios más importantes y de mejor acústica de Europa. Sobre el escenario del NOSPR repetirán por última vez un aplaudido programa cuya primera parte protagoniza el universal 'Boléro' de Ravel, «que reivindicamos como vasco».
Publicidad
Aunque es desde los primeros compases de 'Pavane pour une infante défunte' del compositor labortano que Euskadiko Orkestra ha ido marcando territorio y ganándose a un público expectante ante la que sin duda se presentaba como obra fundamental del concierto, la compleja 'Quinta' de Mahler. 70 minutos de partitura dan espacio para conocer todo el universo sonoro de un compositor, pero también para comprobar la capacidad de una orquesta.
La respuesta del público puesto en pie en cada una de sus comparecencias para dar paso a largas ovaciones ha tenido gran impacto en la orquesta, que ha respondido con dos y hasta tres bises, completando casi tres horas de concierto en cada ciudad. La 'Amorosa' de Jesús Guridi, el Intermedio de 'Las Bodas de Luis Alonso' de Gerónimo Giménez y la 'Danza húngara nº5' de Brahms han sido las partituras que los músicos guardaban en el atril para cerrar cada velada.
Publicidad
Visitas ilustres
A lo largo de estos días son muchas las personas y representantes institucionales que han acompañado a Euskadiko Orkestra en su presentación en Polonia. El concierto de Varsovia contó con la presencia de la presidenta del Festival Beethoven, Elzbieta Penderecka. La consejera de Salud del Gobierno Vasco, Gotzone Sagardui, abrió la representación institucional vasca en la capital polaca junto a Javier García Cogorro, consejero delegado de Viralgen, empresa patrocinadora del concierto.
Al concierto de Cracovia asistieron el vicepresidente de Cultura del Gobierno de Cracovia, Robert Piaskowski; el cónsul de Polonia en Burgos, Enrique de Villamor y Soraluce; la directora del Instituto Cervantes, Beatriz Hernanz; y el director de orquesta polaco Antoni Wit, titular durante varios años de la Orquesta Sinfónica de Navarra y hoy director honorario de la Orquesta Filarmónica de Cracovia.
Publicidad
Junto a esta representación, Euskadiko Orkestra se ha visto acompañada también de un sinfín de familiares de sus músicos polacos, de numerosas amistades de integrantes de la orquesta, así como de 'vascos por el mundo' y de jóvenes en tiempo de Erasmus atraídos por la presencia de Euskadiko Orkestra en sus ciudades polacas de adopción.
Suscríbete los 2 primeros meses gratis
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión