Las compañías vascas se miden con los programadores en dFeria
El lunes comienza el festival de teatro que tendrá un prólogo este sábado con el estreno del espectáculo familiar de Tutik Clowns
Algunas obras son estrenos totales, otras han tenido un rodaje previo o se acaban de presentar por primera vez al público. Pero durante cuatro ... días, a partir del próximo lunes, muchas compañías vascas se enfrentarán a los programadores que reúne dFeria, además del público que también acude a los teatros, para tratar de encontrar nuevos horizontes para sus espectáculos y armar giras para los próximos meses.
Aunque la feria comienza oficialmente el lunes, este sábado habrá un prólogo para ir calentando el ambiente en San Sebastián, que acogerá en diversos escenarios, con el teatro Principal y el Victoria Eugenia como sedes destacadas, cerca de treinta espectáculos de otras tantas compañías, muchas de ellas vascas.
Los encargados de ir caldeando el ambiente son los tres componentes de Tutik Clowns, que ofrecerán un espectáculo con carácter «muy familiar», en el que los niños se divierten mucho, «pero también los mayores disfrutan con los detalles», que lleva por título 'Petit Chou'. Será el sábado en el Principal a las 17.30 horas. Garikoitz Muñoz, Ramón Irizar y Joxan Malvido celebran además sus 25 años juntos con este espectáculo que recurre «antiguos sketches de clownes que se han hecho tradicionalmente y se han ido adaptado al ámbito actual», explica Ramón. 'Petit Chou' se apoya mucho en la participación del público, se trata de «montar una fiesta en la que pasan cosas. Queremos hacer reir, con música y participación, como se hacía en las antiguas entradas de payasos».
Otros nombres bien conocidos de las artes escénicas vascas también desfilarán por dFeria. Es el caso de Jon Maya y la compañía Kukai. Después de varios espectáculos que han logrado gran éxito y muchos premios, creados con un formato amplio de siete u ocho participantes, en esta ocasión Kukai se presenta de la forma más íntima, con «tres personas en el escenario y un solo un bailarín», explica Jon Maya, que después de haber estado más en tareas de creación en los últimos tiempos, vuelve a bailar, y en solitario. 'Gauekoak', que se presentará en el Principal el lunes a las 18.30 horas, nace de «una reflexión bastante íntima, pensar en tu futuro como bailarín, y en el escenario como lugar de trabajo».
Maya ha trabajado con tres coreógrafos, pero «como bailarín. Les he dicho 'aquí tenéis un cuerpo y una persona, a ver a dónde vamos», comenta Jon Maya, que ha contado con las creaciones de Cesc Gelabert, Israel Galván y Sharon Fridman, además de su propia coreografía. Esas cuatro piezas dan estructura a un espectáculo que no es narrativo pero «puede hablar de la vivencia de muchos creadores, de esas noches llenas de inquietudes, misterios y motivaciones, desde la intimidad», explica el bailarín y coreográfo sobre un espectáculo en el que participan Mireia Gabilondo como directora de escena y Fernando Bernués como escenógrafo.
Y ambos presentan su propia obra en dFeria, la de la compañía Tanttaka, titulada 'Deje su mensaje después de la señal', basada en la novela de Arantza Portabales, que ya lleva unos meses de rodaje por los esceanarios y reúne las historias de cuatro mujeres que se comunican a tráves de mensajes de voz que dejan en los contestadores automáticos de otras tantos hombres, un padre ausente, un ex marido, un psicólogo y un hijo médico que está en el Sahara trabajando en una ONG. Las que hablan son «mujeres en situaciones comprometidas y difíciles pero que afrontan sin miedo y con valentía los cambios de la vida», explica Bernúes. A Carmela le han diagnosticado un cáncer, no quiere que su hijo vuelva del Sáhara, y por eso le relata sus impresiones en sus mensajes. El personaje de Oiahana Maritorena trabaja en Ikea, pero es prostituta, y en el contestador de su padre va contando por qué ejerce la prostitución. Los cuatro personajes utilizan el contestador para contar «esas cosas que no nos atrevemos a decir frente a frente». La obra se está recibiendo «con mucha cercanía», y en verano viajará a Madrid y a Galicia. «Es un trabajo de interpretación puro y duro que nos está dando muchas alegrías», asegura Mireia Gabilondo.
La compañía Vaivén estrenó hace unos días su ambicioso musical basado en la figura de Sor Juana Inés de la Cruz, 'Yo, la peor del mundo', y llega a la feria con la tranquilidad de que la obra «ha gustado mucho, ha tenido muy buenas críticas, y ver a la gente en pie al final nos deja más tranquilos a la hora de presentar la obra en feria, porque todo ha funcionado», explica Ana Pimenta, productora de la obra, además de actriz junto a Itxaso Quintana, Nerea Gorriti, Ainara Ortega y Ugaitz Alegría.
Este espectáculo que se presentará el martes a las 18.30 horas parte de una figura «absolutamente fascinante, nos impactó que en el siglo XVII desafió a la iglesia, y a la sociedad. Le tocaba casarse, tener hijos y entregarse a una sociedad misógina, pero ella decidió otra cosa», explica Pimenta. La obra cuenta con nueve canciones con música de Iñaki Salvador. «Tiene momentos cómicos y elementos dramáticos, y se dirige a todos los niveles que puedan buscar los distintos públicos, tanto para el que quiere una reflexión sesuda sobre la figura de Juana Inés, a quien quiera pasión, sentimiento, emociones y una historia de amor», indica Pimenta.
En otro contexto, en el ámbito de calle que supone actuar en el Boulevard, el miércoles a las 19.30 horas, se presentarán Hutsun & Ortzi con 'Urbasa', un espectáculo que combina la música de los txalapartaris Mikel Hernández Urrutia y Anai Gambra Uriz con las acrobacias de Ortzi Acosta, excomponente del Circo del Sol que ofrece «números aéreos, uno de investigación, otro de cuerda aérea, un tercero de fuerza y equilibrio en el suelo, y el último, más poético que acrobático», explica Ortzi. Lo que proponen a través de los dos lenguajes combinados es «un viaje por Urbasa, a través de la expresión corporal, musical y de imagen, que se abre a que cada uno viaje de manera distinta, según lo que está viviendo emocionalmente. Se trata de ver qué reflexiones te sugieren lo que estás contemplando», apunta Anai Gambra.
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