El equipo de Woody Allen desembarca en el Palacio de Miramar, 'cuartel general' del rodaje
Los técnicos de la productora ultiman ya las localizaciones en Donostia para rodar en julio. Falta aún la confirmación formal desde EEUU pero el rodaje del cineasta es ya un hecho: la tercera planta de Miramar será la oficina técnica donde se instala en breve su equipo
Un espacio de 120 metros cuadrados en la tercera planta del Palacio de Miramar será el 'cuartel general' desde donde se gobernará el rodaje ... de la nueva película de Woody Allen en Donostia. Aunque falta que desde la oficina del cineasta en Estados Unidos se lance la confirmación oficial de la nueva película, su equipo trabaja ya intensamente en San Sebastián para iniciar el rodaje en julio, según ha podido comprobar este periódico.
Técnicos de la productora Mediapro, socia española en el proyecto de Allen, visitan estos días diferentes localizaciones de Donostia y Gipuzkoa y negocian con los responsables de los lugares, tanto públicos como privados, cómo serían los detalles de la producción. Se trata de un «trabajo de campo», según explican fuentes del sector, a la espera de que el 'núcleo duro' del director, o él mismo, den el visto bueno a las localizaciones en las próximas semanas.
En los próximos días esa primera avanzadilla del equipo tendrá ya una oficina técnica estable. El consorcio público responsable del Palacio de Miramar ha aprobado ya ceder a la productora parte de los locales de la tercera planta, donde estuvo Musikene y ahora se encuentra sin uso. Según ha podido saber DV, la productora pagará en torno a 30.000 euros por utilizar unos 120 metros cuadrados desde ahora hasta finales de agosto, cuando termine el rodaje. En principio serán unos pocos profesionales los que trabajen en ese espacio dentro de unos días pero pronto la cifra llegará hasta los 25 técnicos.
Siete semanas de verano
Tanto desde Mediapro como desde el Ayuntamiento se mantiene absoluta discreción sobre el rodaje. El responsable de la productora catalana, Jaume Roures, se reunió con el alcalde de la ciudad, Eneko Goia, el pasado 17 de abril. En esa charla ultimaron los detalles para agilizar los trámites del rodaje, al tiempo que acordaban un 'apagón' informativo a la espera de que desde Estados Unidos se dé la información completa sobre el proyecto que supone el regreso a la dirección de Woody Allen.
La primera 'avanzadilla' del equipo se instala en la oficina de Miramar dentro de unos días
En una rueda de prensa anterior Roures sí avanzó algunos contenidos «aunque a mi amigo Woody le gusta mantener el secreto». Una pareja de creadores vinculada al mundo del cine sería la protagonista de la ficción. El papel de ella correría a cargo «de una estrella norteamericana de dimensión internacional», en palabras del propio Roures. El argumento estaría relacionado con el Festival de Cine de San Sebastián, que Allen conoce bien porque aquí recibió el Premio Donostia. De hecho fue el propio cineasta el que expresó desde el principio su deseo de que la película transcurriera en la capital guipuzcoana.
El rodaje durará siete semanas y comenzaría a primeros de julio, según los datos avanzados por la productora en sus primeros contactos con el Ayuntamiento. Se trata de una producción mediana pero movería en torno a un centenar de profesionales y unos 14 vehículos de gran tamaño en una época estival en que San Sebastián está ya al límite de capacidad. Entre los escenarios barajados figuran La Concha, el Peine del Viento, el Kursaal y la Zurriola.
Las instituciones locales no aportan financiación. Desde el Ayuntamiento se pidió al sector hotelero que colaborara con unos «precios ajustados» para alojar al equipo de la película en plena temporada alta.
El dato
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30.000 euros pagará la productora del filme por utilizar hasta agosto 120 metros cuadrados de la tercera planta de su oficina en Miramar
Clarinete antes del cine
El inicio del rodaje en julio llegará solo unos días después de la gira musical que Allen realizará por España en junio, y en la que ya estará asentado en Donostia como base. El cineasta tocará el clarinete con The Eddy Davis New Orleans Jazz Band el 16 de junio en el Euskalduna de Bilbao, el 18 el festival de Pedralbes en Barcelona y el día 20 en las «noches del Botánico» en Madrid.
Allen tendrá su base en Donostia en su gira de conciertos por España en el mes de junio
La película supondrá el regreso a la dirección de Woody Allen después de los problemas sufridos en su país por las acusaciones, no probadas judicialmente, de Dylan Farrow, hija adoptiva del cineasta, de haber sufrido abusos sexuales del director cuando ella tenía siete años.
El último estreno del cineasta fue 'Wonder Wheel', en 2017, y aunque el director tenía contrato con Amazon para más filmes la firma paralizó el proyecto. Allen presentó en febrero una demanda contra Amazon con exigencia de 68 millones de dólares por incumplir un acuerdo para la producción de cuatro películas, entre ellas la terminada 'A Rainy Day in New York', aún sin estrenar.
El director no encuentra editor para sus memorias
Woody Allen lleva un año tratando sin éxito de vender sus memorias a varias editoriales, que prefieren no trabajar con el cineasta después de que el movimiento #MeToo volviese a centrar la atención en las acusaciones de abusos sexuales en su contra, según The New York Times. Ejecutivos de diversas editoriales dijeron al diario que un representante de Allen ofreció el libro a sus empresas y que no hicieron ninguna oferta por la publicidad negativa que habría generado su publicación.
Algunos editores se negaron directamente a leer el manuscrito, según esas fuentes, algunas de los cuales consideran «tóxica» la posibilidad de trabajar con el director estadounidense.
La falta de interés de las editoriales subraya la caída en desgracia de Allen, que ha visto cómo parte de la industria se distanciaba de él tras el estallido del #MeToo. Por eso decidió rodar en España de la mano de Mediapro.
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