Mamporros con purpurina

Como 'Joker', pero en una dirección absolutamente distinta, 'Aves de presa' renuncia al mundo de superhéroes que se le supone al personaje original de D. C. Comics. Y opta por una histeria narrativa, una llamada de atención continua con textos en pantalla sumados a la voz en off de la protagonista y los saltos temporales, que acaba resultando inane, de puro repetitiva y escasa de ingenio.

Al principio tiene sus ramalazos de gracia y aún perviven las esperanzas de que esa Margot Robbie convertida en pizpireta peleona conserve algo del encanto innato y la calidad interpretativa de la actriz, sepultados por maquillajes, vestimentas, gesticulaciones y verborrea esquizoide. Pero el alocado personaje va a más, y aunque haya un poco de contrapunto y sensatez en la actuación de Rosie Pérez como la policía de una Gotham City, que tampoco tiene especial distinción visual, no hay remedio. Si se trataba de generar hora y tres cuartos de locura, gracietas y ruido en nombre de la frivolidad, con una violencia entre brutal e infantiloide, objetivo cumplido. En la supuesta emancipación mejor no profundizar...