Andoain

La cantante Izaro regresará este viernes a un Bastero con todas las butacas vendidas

El fenómeno Izaro vuelve a notarse en Andoain, y para prueba la taquilla de Bastero. Las entradas para el concierto de la cantante mallabitarra se han esfumado en cuestión de días, colgando el cartel de 'No hay entradas'. Y es que el éxito y acogida viene justificado cuando las posibilidades de ver a la artista se han reducido en Gipuzkoa, con los dos primeros conciertos en Donostia y un tercero en Azpeitia en marzo, mucho más a un precio tan competitivo de 12 euros. Afortunados los presentes que este viernes, a partir de las 20.00 horas escucharán en directo su nuevo disco, 'Cerodenero'.

Una propuesta conceptual, quinto en su carrera, que sirve como mirada introspectiva, con canciones que van por géneros como pop, folk y electrónica. Una mezcla de sensaciones que hará a los presentes contemplar la belleza de su voz desde la butaca y ponerse en pie para bailar los ritmos más marchosos que incluye en su repertorio.

La puesta en escena, como sus fans conocerán, ha variado desde la compañía de su guitarra, apenas fija sobre el escenario, a convertirse con este nuevo trabajo en una bailarina más como las grandes artistas. Todo un espectáculo de luces y coreografías que llegará mañana viernes a Andoain.

Pero la razón de este despliegue está en la fragua de este quinto disco, que tras 'Limones de oro' supuso el quiebre de Izaro Andrés. La fama y el foco mediático que supuso aquella cuarta entrega le obligó a llevar un proceso de «autojusticia y alta montaña» que se traslada a su última producción. La influencia de la pandemia, tiempo en el que comenzó a tejer este disco, trastocó aún más su estabilidad, necesitando de un año sabático para depurarse y volver con mayor energía. Reflejo de esa «expedición de alta montaña» es 'Cerodenero', tanto en el interior del disco, con sus canciones que van desde el duro ascenso, la llegada a la cima y lo que observa, hasta el descenso y repaso de parte de su carrera, como en todo el trabajo de promoción.

Izaro no es una extraña en la programación del centro cultural Bastero, ya que en este primer concierto de la nueva agenda cultural, enmarcada en primavera, la mallabitarra ha pisado cuatro veces Andoain para deleitar a los asistentes con su voz.

La primera vez que se subió al escenario del auditorio fue con su segundo trabajo de estudio, 'Eason', allá por junio de 2018, siendo ya una conocida en el panorama musical euskaldun. La crítica alababa sus directos y su disco, algo que le valió para llenar los escenarios del teatro Arriaga de Bilbao o el Victoria Eugenia de Donostia.

Dos años más tarde, en diciembre, llegó con 'Limones en invierno', tercera propuesta con folk-pop alternativo y actual, mezclando pasado y futuro musical. Una ventana a su 'universo limón' que contenía «joyas pop, valses, ritmos latinoamericanos, momentos acústicos a corazón abierto y temas que cabalgan por el folk anglosajón más otoñal», señalaban desde la discográfica.

Y dos después, en julio de 2022, la cantautora cambió de escenario y ofreció un concierto más íntimo en el parque Otieta, a la vera del río Leitzaran. Una propuesta más acústica con la que presentó su disco 'Limones de oro', cuarto en su carrera. Al igual que ha sucedido en esta, la mallabitarra agotó rápidamente las invitaciones para disfrutar de su música en una atmósfera diferente, en pleno contacto con la naturaleza.

Para este cuarto concierto la madurez artística y musical de Izaro será una de las notas altas dentro del auditorio de Bastero Kulturgunea. Una ocasión única para los presentes de ver a la cantante que posteriormente sonará en el Zeidfest Gaztea, Gijón, Villagarcía de Arousa, Valladolid, Zalla, Logroño y Cascante, antes de anunciar nuevas fechas. Localidades cercanas para aquellos que no hayan podido hacerse con alguna entrada para mañana.