El vial de la plaza Ensanche se reabre limitado a 20 por hora
La calzada al nivel de las aceras y el acabado estético quieren reforzar la sensación de que se trata de un tramo «más peatonal que de tráfico»
El vial lateral de la plaza del Ensanche, el que conecta la calle Cipriano Larrañaga con República Argentina, vuelve a estar abierto al tráfico tras ... su reurbanización.
La fisonomía de este tramo ha cambiado notablemente con la obra realizada: «plataforma única, aceras más anchas que mejoran los itinerarios peatonales, velocidad del tráfico limitada a 20 por hora y un acabado de asfaltado impreso (simulando adoquines) que advierte a los vehículos que entran a una zona más peatonal que de vehículos», detallaba la directora de Obras Ana Baena.
La delegada del área Cristina Laborda apuntó que se han aprovechado las obras de reurbanización propias de las nuevas viviendas construidas en la zona para aumentar la actuación y «llevar la plaza hasta la puerta de los edificios en una plataforma única, sin que haya un corte para la calzada. Se trataba de crear un espacio más amable y con preferencia peatonal».
Aunque en menor medida, la renovación también se ha producido en la perpendicular, la calle Zuberoa, la cuesta de subida a Mendibil para el tráfico rodado. Con la eliminación de una banda de aparcamiento se han ensanchado las aceras para «mejorar también aquí el itinerario peatonal», valoró el alcalde José Antonio Santano. «Con esta obra se ha reforzado el carácter urbano de estas calles que parece mentira que tuvieran unas aceras tan estrechas, impropias del entorno en el que están, céntrico y muy amplio». Incidió en que ahora, tras las obras, estas dos vías comparten «ese carácter más peatonal que tiene el Ensanche, sobre todo desde que se eliminó el paso de vehículos en los lados cortos de la plaza».
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