Irun Ekintzan sienta las bases del plan de recuperación económica post-Covid

Aunque el conjunto de propuestas parte de una «reflexión estratégica sobre acciones y objetivos que ayuden a Irun a enfrentarse mejor a la situación actual y a encontrar salidas para la recuperación económica», lo cierto es que se han tenido muy presentes los criterios de la Unión Europea para la concesión de fondos a través del Plan Europeo de Recuperación y del Proyecto de Convocatorias ordinarias. Las acciones recogidas en el plan de Irun Ekintzan, tanto las lideradas por el Ayuntamiento y Bidasoa activa como las que corresponden a otros niveles administrativos, tienen perfecto encaje con los criterios europeos para la concesión de ayudas. Esa financiación europea podría acelerar la transformación hacia la que mira el plan de Irun Ekintzan.

El documento recoge un ambicioso listado de 17 proyectos entre los de iniciativa institucional y los compartidos en colaboración público-privada. Una lista confeccionada pensando «en el futuro y en las nuevas oportunidades de recuperación, revitalización y dinamismo de Irun. Una lista viva que podrá ir incorporando nuevos proyectos y una definición más detallada de los existentes».

Las propuestas del documento abarcan un amplísimo espectro de inversión en diferentes frentes. Entre los cinco proyectos público privados aparecen iniciativas de alto valor tecnológico, colaboración transfronteriza y sectores clave como movilidad y transporte o sanidad.

En la parte pública destaca sobre todo Vía Irun, que se presenta en este documento desglosado en varios proyectos con distintas administraciones al frente. Se plantea que el Ayuntamiento pueda desarrollar la rehabilitación del edificio de la Aduana (21 millones) como punta de lanza del futuro Distrito Urbano Innovador, que cuenta con su propio apartado (26 millones) sólo para completar el planeamiento y adquirir los suelos entre consistorio, Diputación y Gobierno Vasco. En 60 millones de euros se presupuesta inicialmente la nueva estación ferroviaria, en cuyo proyecto ya trabaja el Adif, y en 55 millones, el planteamiento de Eusko Trenbide Sarea de mover su línea a la vecina plataforma del Adif y renovar varias de sus estaciones. El total de inversión que requiere este macroproyecto capaz de cambiar la ciudad en pocos años supera los 160 millones de euros.