Irun

«Iracheta trabajó mucho por temas que ahora nos parecen derechos básicos»

El domingo se celebrará el acto de conmemoración a Florencio Iracheta frente a la que fue su casa, 'Villa Libertad', en Anaka. Al homenaje, abierto a la ciudadanía, asistirán la alcaldesa, Cristina Laborda y la delegada de Memoria Democrática, Nuria Alzaga. En la plaza que lleva su nombre se bailará un aurresku junto a la banda de txistularis y la Banda de Música Ciudad de Irun.

Después, el historiador Pedro Barruso ofrecerá en el Casino de Anaka una charla sobre la importancia de Florencio Iracheta en la ciudad. «Es un personaje que merece ser recordado, un símbolo de la tragedia y de las rencillas políticas, del odio que vivió y que llevó a que lo fusilaran, sin tener culpa de nada y acusándolo de todo. Lo asesinaron en la Guerra Civil, en 1938, después de que le capturaran en un barco tras el combate naval de Matxitxako. Fue un hombre muy implicado en la construcción de viviendas baratas en Irun. Toda la zona de Anaka, de la cooperativa irunesa de 'casas baratas', fue impulsada por el», adelanta Barruso.

En la actualidad es difícil hacerse una idea de lo que significó urbanística y socialmente algo así. «Para poder pedir una casa barata había que ganar menos de 6.000 pesetas, lo que son ahora aproximadamente 30 euros. Estamos hablando de muy poco dinero, el que ganaban los obreros en aquella época. El acceder a una vivienda era muy complicado. Toda esa barriada se hizo por su impulso, una labor que desarrolló entre 1924 y 1930. En principio eran 144 casas, un proyecto importante, con zonas comunes, una escuela, un casino... En aquella época se llevaba el higienismo, que fueran casa salubres, aireadas. Eran casas individuales, prácticamente lo que hay ahora. Era un proyecto ambicioso para dotar a Irun de vivienda que no había», explica.

Para comprender la situación de la época hay que tener en cuenta que «en Irun había un problema grandísimo de vivienda, había muy pocas casas, eran muy caras y los alquileres eran altísimos. La tendencia era al inquilino, no a la compra de cada. Había una política del gobierno de hacer casas asequibles para que los obreros pudieran tener viviendas. Lo subvencionaba el Estado y en Irun, Iracheta fue el primer presidente de la asociación de vecinos, y después de la cooperativa hasta los años 30. Cuando pasó a ser concejal lo dejó, evidentemente».

Natural de Madrid, no era de Irun y algunos sectores se lo echaban en cara: «llegó con 25 años, en 1920. En Irun tuvo a sus hijas y era una persona de aquí, pero sus enemigos políticos se lo recordaban de vez en cuando. Hizo más por la ciudad que el que era de Irun de toda la vida. Una de las casas de la zona, Villa Libertad, era suya; se la incautaron y se convirtió en Villa España. Fue también cuartel de la Policía Armada y en el 73 vuelve a manos privadas. Pero de alguna manera, su casa sigue estando ahí», apunta.

Iracheta fue clave en cómo conocemos hoy en día la ciudad: «hizo mucho por Irun. Durante la Segunda República tiene mucha actividad también como concejal, y sobre todo se hizo cargo de la lucha contra el paro, que antes era cosa municipal. También es importante conocer su historia porque él y Evaristo Larrañaga mueren de una forma injusta. Fueron elegidos democráticamente, y luego los fusilaron en Burgos».

Para acudir a la charla del domingo es necesaria una inscripción previa. «Coincide con el 86 aniversario que lo fusilan en Burgos. Es un día triste, pero podemos transmitir que a pesar de todos los intentos la memoria de Iracheta pervive. No es una persona que se haya olvidado. Se han localizado sus restos recientemente en Burgos: va a ser complicado recuperarlos, pero están localizados. Queremos recuperar la idea de aquella gente que trabajaba mucho por cosas que ahora nos parecen derechos básicos. El derecho a una vivienda digna está reconocido en la Constitución actualmente, y en aquella época era algo complicado», concluye Barruso.