Eibar

Mantilla y medias las mujeres, y traje los hombres

La Semana Santa, influenciada por las normas sociales y religiosas marcaban no solo los actos litúrgicos, sino la forma de vestir. «Era costumbre que las mujeres llevaran mantilla como símbolo de respeto, devoción y solemnidad que se usaba especialmente durante el Jueves y Viernes Santo. Solía ser negra, acompañada de una peineta alta, y era reservada para mujeres adultas, aunque también algunas jóvenes la llevaban». La mantilla se asociaba con momentos de luto y recogimiento, por lo que su uso tenía connotaciones religiosas profundas. Igualmente, las medias finas o gruesas, siempre cubrían las piernas con lo que era impensabli que se llevaran descubiertas. Los hombres iban vestidos de traje y corbata. «Recuerdo que el alcalde llevaba siempre el bastón de mando, un asunto que recordé a los actuales mandatarios municipales».