Ibarburu valora con nota muy alta la temporada del Avia Eibar

La temporada 17/18, que terminó hace veinte días, dejó para el Avia Eibar Rugby un saldo positivo en general, como club y como equipo. En este caso, el sénior masculino ha quedado en la séptima posición, con un rendimiento que se puede dividir en dos etapas claras. Gastón Ibarburu resalta que «en la primera, desde el inicio hasta fines de enero, se vio un equipo fuerte, que sabía a lo que quería jugar y con un objetivo muy claro de ir enfrentando partido a partido y asumiendo el desafío del fin de semana correspondiente, con un objetivo general de la temporada de lograr 50 puntos para estar tranquilos».

Luego, hay una segunda, a juicio del técnico, que «va de febrero a fin de liga, en el que el cansancio se notó mucho en la competencia y en los jugadores, ya que no hubo descanso entre partidos por los aplazamientos contra Vigo y Bera Bera. Y se consiguió el objetivo de los puntos y por consiguiente la relajación de haber conseguido el objetivo propuesto».

El preparador uruguayo matiza que «con respecto a la primera etapa, creo que se vio un equipo muy conjuntado y que creía en sus posibilidades sin bajar los brazos en ningún momento, pero sabiendo que la desconcentración nos llevaba a hacer partidos en los que no salía nadie satisfecho. Pero ese mismo motivo nos hacía estar alerta y por eso nos llevamos partidos como contra Durango (35-36 jugando con 14) o el partido contra Bathco (segundo clasificado del grupo) en Santander que se ganó con un categórico 28 a 43. Luego del parón navideño también ganar al Zarautz fue una inyección de ánimo para el resto de liga».

Añade Gastón que «la segunda etapa de la liga está marcada por la inconstancia del equipo y más que nada por el cansancio físico y mental que provocó el no tener fechas de descanso por los partidos aplazados. Y jugar once partidos seguidos, casi tres meses sin parar, es excesivo. Eso llevó al equipo a la desconcentración y jugar contra rivales que a priori eran más débiles y perder dejando malas sensaciones, aunque también se hicieron buenos partidos. Lo menos agradable fueron las derrotas de los últimos dos partidos de la liga».

La conclusión general es totalmente positiva. «El equipo ha crecido en cuanto a juego y a gente. La temporada del equipo sénior masculino en general es muy buena, tuvimos dos equipos compitiendo a la vez y a muchos jugadores comprometidos con el club, que creo que le hacía mucha falta para el desarrollo de los mismos». Ibarburu resalta el papel de los jugadores de la cantera. «Abastecerse de jugadores de la cantera que han llegado y dieron aire fresco a la plantilla y complementado con la vuelta de algún veterano, más todos los jugadores que vienen dando la cara en los últimos años, ha hecho que se haya conjuntado un plantel de cuarenta y seis jugadores que han luchado por el club, dándolo todo en cada encuentro. Todo esto sumado a los éxitos del equipo femenino, los integrantes de la academia y la escuela hacen ilusionarnos a Cristina Guntín, entrenadora/jugadora del femenino y coordinadora, y a mí, con este proyecto que sin duda alguna seguirá creciendo y cosechando éxitos y cada vez será un club de más influencia en la sociedad eibarresa y alrededores». La satisfacción reina en el club armero con el trabajo realizado en la presente campaña.