El filial pone fin a una brillante campaña a las puertas de la final por el ascenso

El Eibar B cerró el domingo una temporada para el recuerdo. Pese a caer eliminado en la vuelta de las semifinales del playoff de ascenso a Primera Federación frente al Sabadell (0-1), el conjunto dirigido por Íñigo Pérez se despide con la cabeza alta, tras un curso en el que ha demostrado personalidad, talento y un crecimiento constante.

En una eliminatoria igualada, los armeros compitieron hasta el final frente a un rival veterano, sólido y muy exigente. El gol de Polo en el tramo final del encuentro selló el pase del Sabadell a la final, pero no borró la gran imagen que dejó el Eibar B en este play-off de ascenso a la categoría de bronce del fútbol nacional.

El equipo ha firmado un año de enorme mérito. Clasificado como tercero de su grupo en Segunda Federación, el filial armero se ganó el derecho a soñar y lo hizo con un estilo de juego que le ha permitido competir de tú a tú frente a grandes equipos. En la ida, ya mostraron su carácter empatando en la Nova Creu Alta en el minuto 90, y en la vuelta, empujados por un Ipurua entregado, lucharon hasta el último minuto por llegar a la final.

Al término del encuentro la afición reconoció con una gran ovación el trabajo de un grupo que ha superado las expectativas. No hubo ascenso, pero sí un equipo que ha crecido partido a partido.