Eibar

Las escaleras mecánicas serán sustituidas por otras nuevas con una inversión de 272.855 euros

Estas escaleras, instaladas en el año 2002, han prestado servicio durante más de dos décadas, facilitando la movilidad en una zona de fuerte pendiente.

Ahora, el Consistorio ha lanzado el proceso de licitación para su renovación completa, con un presupuesto base de 272.855,00 euros, con el plazo para la presentación de ofertas estará abierto hasta el 19 de mayo, momento en el cual se estudiarán las propuestas para acometer la obra lo antes posible.

El alcalde de Eibar, Jon Iraola, ha valorado muy positivamente esta actuación. «Se trata de una mejora muy demandada, ya que estas escaleras son clave para la accesibilidad en una zona con mucho tránsito. Seguimos trabajando para hacer de Eibar una ciudad más cómoda, accesible y moderna», señala.

Por su parte, el concejal de Obras, Pedro Escribano, ha subrayado la importancia técnica de la actuación. «No solo estamos hablando de sustituir una maquinaria obsoleta, sino de mejorar el servicio con una instalación más eficiente, segura y adaptada a las necesidades actuales. Esta intervención refleja el compromiso de este equipo de gobierno con la mejora continua del espacio público», recalca. No obstante, la fuerte pendiente y su larga dimensión ha sido también uno de los problemas para que fueran objeto de su cierre, para efectuar su reparación.

Junto a ello, en 2016, el Ayuntamiento comenzó a instalar el sistema de 'Stop & Go' a los tramos de Tiburcio Anitua-Bustinduitarren, los cinco entre Errebal y Jardiñeta y el último de Legarre Gain.

Con este sistema las escaleras permanecen paradas hasta que la instalación detecta presencia. Con esta medida se persigue la mejora de la eficiencia energética. Actualmente, son 18 las instalaciones mecánicas de Eibar que tienen este sistema. En una fase se implementaron 9 instalaciones: los tres tramos de Tiburcio Anitua-Bustinduitarren, en Legarre y las cinco instalaciones que van desde Errebal a Jardiñeta, junto con Zezenbide, Unzaga, Urki...

En diversas ciudades, las autoridades están considerando reemplazar escaleras mecánicas por ascensores debido a los elevados costes de mantenimiento y frecuentes averías de las primeras. Este cambio busca mejorar la accesibilidad y reducir los gastos operativos a largo plazo.

El mantenimiento de escaleras mecánicas representa una carga económica significativa para las administraciones. En el caso de Eibar, el mantenimiento de las escaleras oscila entre 600.000 a 700.000 euros al año. Por ejemplo, la Comunidad de Madrid destinó más de 27 millones de euros en cuatro años al mantenimiento de 770 escaleras mecánicas del Metro. Además, estas instalaciones al sufrir averías frecuentes afectaba negativamente a la movilidad de los ciudadanos.​ Por su parte, Vitoria-Gasteiz ha invertido 1,7 millones de euros en tres años para el mantenimiento y mejora de las escaleras mecánicas y ascensores en el Casco Medieval, incluyendo la implantación de un sistema de control de calidad para asegurar el cumplimiento del contrato y el estado de las instalaciones.

Otros casos son los de Toledo, donde las escaleras mecánicas, durante mucho tiempo, estuvieron fuera de servicio debido a la imposibilidad de encontrar piezas de recambio. El Ayuntamiento propuso sustituirlas por un ascensor de gran capacidad o dos ascensores normales, opciones más económicas y sostenibles.​

Los ascensores ofrecen varias ventajas sobre las escaleras mecánicas. Entre las más importantes están la accesibilidad universal, puesto que son adecuados para personas con movilidad reducida, carritos de bebé y usuarios en silla de ruedas. Igualmente, también suponen una menor ocupación de espacio y requieren menos espacio en planta, lo que facilita su instalación en áreas urbanas densas.​

Los ascensores que ahora se han instalado en Eibar cuentan con costes operativos reducidos. Aunque la instalación inicial puede ser costosa, puesto que exigen una obra civil de adecuación, los gastos de mantenimiento suelen ser inferiores a los de las escaleras mecánicas.​ Este es el caso de los elevadores de Ubitxa que exigieron una importante obra de urbanización para salvar la pendiente. En este sentido, vinieron a costar, los dos elevadores un total de 1,6 millones de euros, de los que 1,2 recibieron subvención de los fondos europeos. Por ello, para el Ayuntamiento fue una inversión mínima. En definitiva, la sustitución de escaleras mecánicas por ascensores se presenta como una solución viable para mejorar la accesibilidad y reducir los costes de mantenimiento.