Eibar

El Ayuntamiento culmina la modernización de su plantilla con la valoración de puestos

El Ayuntamiento de Eibar culmina un paso clave hacia la modernización de su estructura organizativa con la valoración de los puestos de trabajo.

El proceso completa uno de los proyectos más relevantes de su estrategia de modernización administrativa: la valoración de los puestos de trabajo (VPT) del personal municipal. Esta herramienta, fundamental para una gestión eficaz de los recursos humanos, busca establecer una estructura retributiva «más justa» y adaptada a las funciones reales que desempeñan los empleados públicos.

La VPT es un procedimiento técnico que analiza de forma objetiva las características de cada puesto en función de criterios como la responsabilidad, la formación exigida, la carga de trabajo, la autonomía o la complejidad de las tareas. No evalúa a las personas, sino al contenido y valor del trabajo desempeñado. Este análisis permite ubicar cada puesto en su nivel adecuado dentro de la estructura organizativa y retributiva.

Según incidía el alcalde, Jon Iraola, «el proceso de valoración está terminado y, obviamente, no va a satisfacer a todo el mundo, porque algunos suben, en valoración, otros se mantienen, y cuando se baja a uno, le duele», ha reconocido el regidor eibarrés. «Yo también he estado en una empresa en la que se hizo una valoración y es muy difícil que contente a todos, pero sobre todo tiene que ser ajustada a las funciones y a los trabajos que efectivamente se realizan. Creo que el personal municipal estaba esperando esta valoración, independientemente de que se queden conformes».

De hecho, este enfoque realista ha guiado todo el proceso, desarrollado con criterios técnicos, participación sindical y una clara voluntad de mejora. El Ayuntamiento ha reiterado su compromiso firme con la implantación de los resultados. «Existe un compromiso de esta alcaldía con que tengan esa valoración y vamos a implantarla», enfatizó Iraola.

Uno de los puntos más delicados del proceso son las situaciones en las que la valoración resulta inferior a la retribución que venía percibiéndo un determinado trabajo. En este sentido, desde el consistorio se ha hecho un esfuerzo por minimizar el impacto negativo. «Hemos acordado que nadie quede afectado por una bajada retributiva. Sin embargo, en el momento en que una persona se jubile o deje su puesto, la nueva persona que lo ocupe sí se ajustará a la realidad de la última valoración realizada», explican desde el Ayuntamiento.

Este enfoque permite mantener la equidad futura sin penalizar a quienes ya ocupaban un puesto valorado a la baja, equilibrando así sostenibilidad presupuestaria con justicia laboral.

Con esta actuación, el Ayuntamiento de Eibar da un paso decidido hacia una administración más moderna, profesional y eficiente. «Aunque el proceso de valoración no está exento de retos y ajustes, su culminación representa una apuesta por la transparencia, la equidad y el reconocimiento del valor del trabajo público», decía Iraola.

Actualmente, el coste del personal municipal representa aproximadamente el 25 % del presupuesto del Ayuntamiento de Eibar, lo que convierte la gestión de recursos humanos en una de las áreas estratégicas de la administración local.

En paralelo al proceso de valoración, el Ayuntamiento ha impulsado una reestructuración organizativa que incluye programas de mentoría y contratos de relevo, destinados a facilitar la transición del personal en proceso de jubilación. Estas medidas apuntan a garantizar la transferencia de conocimiento, mejorar la cohesión interna y fortalecer la continuidad del servicio público.