Cuatro toros negros en una plaza de rojo, blanco y sol

Bajo la presidencia de Usoa Urbieta, asesorada por Luis Mari Pastor y el veterinario Isidro Aristi, se celebró la segunda y última novillada de la Feria de San Roke. Se lidiarion cuatro novillos de Puerto de San Lorenzo y la Ventana del Puerto que podrían, por peso, hechuras y maneras de embestir, haber saltado a plazas no portátiles como la debarra y haberse enfrentado fieramente a caballos de picar. Hubo alguno de los cuatro salamanqueños de ayer que rondaría los 340 kilos de peso mientras que los del domingo estuvieron en unos 225 en canal.