La fiesta del ciclismo baña de amarillo las calles de Oñati

Hace varios días que la fiesta del Tour de Francia dio el 'txupinazo' en Oñati con la anual fiesta pirenaica en Olabarrieta, pero ha sido este domingo que el municipio se ha engalanado para recibir a los 173 ciclistas que este domingo han recorrido el centro del municipio. Tras el paso a mediodía de la caravana publicitaria, que ha tenido una calurosa acogida por los centenares de vecinos que esperaban en las calles, ha sido pasadas las dos de la tarde que los primeros corredores han comenzado a recibir el aliento de los oñatiarras.

Ya desde mediodía el Alto de Udana, el primer gran ascenso de la etapa, presentaba un ambiente multitudinario a falta de más de tres horas para la llegada del pelotón. Ciclistas aficionados con sus maillots, cuadrillas de jóvenes, familias con ikurriñas y niños realzales esperaban bajo el arco de lunares rojos que marca la primera cima del mejor corredor de montaña. Carpas, caravanas y mantas de picnic fueron coloreando la subida al puerto.

El tiempo ha respetado a los ciclistas a lo largo del ascenso, que se han visto acompañados por un buen número de aficionados con banderas. Los tres escapados, Powless, Boasson-Hagen y Cavagna han coronado la cima a las 14.17 horas, seguidos a poco más de 4 minutos por el resto del pelotón.

Como ya anunció el Ayuntamiento, entre las 10.00 y las 15.30 horas el tráfico por carretera ha permanecido cortado desde los dos accesos de la rotonda de San Prudencio hasta Udana. Al margen del cierre perimetral, el Centro de Salud ha estado abierto para ofrecer servicios mínimos. El pelotón ha cruzado el barrio de Subillaga para luego tomar la variante hasta Portalekua, girar por la calle Roke Azkune en dirección a la rotonda de Bidaurreta y despedirse en Udana.

Es por ello que Oñati ha quedado incomunicado hasta pasadas las 15.00 horas. Tampoco se ha paralizado el servicio de autobuses de Lurraldebus y para utilizar el transporte público tan solo se ha mantenido operativa la línea municipal dominical a Arantzazu, con parada única en Elkar Hezi/Eroski.

Es ya tradición que peñas oñatiarras como Lizarralde, Iriziar y Garmendia organicen cada año una subida al Tourmalet o el Aspin para disfrutar del paso de la Grande Boucle. Pero este domingo no ha resultado necesario. El histórico recorrido de la 120 edición del Tour de Francia que en esta segunda etapa ha cruzado Oñati invitó a los comercios del municipio a decorar sus escaparates con maillots, banderines, dorsales históricos, fotografías, cartelería y bicicletas.

El color amarillo de la gran fiesta del ciclismo mundial se ha hecho notar entre los oñatiarras que han bañado las calles para animar a los protagonistas antes de la primera gran subida al Alto de Udana. Pero el ciclismo también ha podido degustarse gracias a las piruletas de chocolate y el pastel de arroz 'Eclair' de Txokolateixia. Como colofón a la fiesta del ciclismo, la Kultur Etxea acoge desde el pasado lunes una exposición de sellos de esta competición, del coleccionista Luis Maiztegi, que podrá disfrutarse hasta las 20 horas de este domingo.

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