Elosua se queda sin feria por falta de relevo y de sensibilidad institucional

La asamblea de vecinos de Elosua certificaba en la última reunión la desaparición de la feria de ganado de montaña que organizaban cada 12 de octubre. Como destacaban en la comunicación del cierre era una muerte anunciada que se veía venir por el declive de la actividad ganadera y el incremento de la exigencias administrativas.

Reconocen los promotores que entre los motivos que han llevado a la decisión pesa sobre todo la falta de relevo en la organización de un encuentro ferial que requiere de un gran esfuerzo e implicación del vecindario. Una situación agravada por la despoblación que afecta a las zonas rurales, como apuntan, «se están vaciando estas zonas aisladas por falta de servicios y ayuda».

Destacan que la decisión ha sido dolorosa para los elosuarras que desde 1979 trasformaban el barrio rural en un gran mercado que tuvo su última cita en 2019. La pandemia no permitió la organización los dos últimos años. Una circunstancia que ha acelerado el proceso hasta la desaparición. Tendencia que ya venía marcada por la dificultades de los últimos años.

En el 79 fue una comisión vecinal la que recuperó una secular feria en torno a la parroquia de San Andrés de Iriaun. Fue la inquietud de los elosuarras la que permitió restaurar la feria que había sido prohibida siglos atrás por la Iglesia que no veía con buenos ojos los «desmanes» que se vivían.

Cuatro décadas después del resurgir, de nuevo un colectivo de elosuarras ha tenido que adoptar la dolorosa decisión de la cancelación. «El trabajo de los vecinos ha mantenido viva la feria durante 41 años, pero la falta de sensibilidad y de políticas eficaces hacia las zonas rurales de las instituciones ha condenado a la feria a su desaparición», apuntan en su nota.

En la despedida han querido agradecer a cada uno de los que han permitido que durante 41 años fuera el referente festivo para los vecinos del Deba y Urola, las dos vertientes con las que conecta Elosua, cada 12 de octubre. «Solo nos queda trasladar las gracias a los que alguna vez habéis participado en la feria, a los que habéis mantenido la costumbre de venir tanto a trabajar como a pasar el día, a los comerciantes de la feria y a todos los voluntarios que han venido a trabajar, a los medios, y a la fundación Hazi que nos ha subvencionado y, cómo no, a los y las vecinas de Bergara y Azkoitia».

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