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A. GONZÁLEZ EGAÑA y Agencias , ZABALLA
Sábado, 16 de junio 2012, 13:16
Roberto Manrique, víctima del atentado de Hipercor, asegura que sale "tocado" del encuentro con el preso de ETA crítico con la banda Rafael Caride Simón en la cárcel de Zaballa. El director del centro penitenciario ha hecho finalmente de mediador y ha estado presente en el encuentro del que Manrique ha quedado muy "satisfecho" . No le ha pedido perdón porque le ha dicho que él se define como comunista y que lo del tema religioso "no le interesa demasiado".
"Aunque la palabra perdón no la ha utilizado ha repetido muchas veces el sentimiento de culpa que tiene y de responsabilidad por todo el daño que ha cometido", ha explicado Manrique a su salida de la prisión donde ha tenido lugar el encuentro que ha durado casi dos horas. Caride Simón se ha ofrecido a hablar con quien se lo pida "para hacerle llegar su dolor por todo el daño que han causado", ha explicado Manrique.
En solitario
Roberto Manrique ha entrado esta mañana a la prisión de Zaballa, solo, sin ningún acompañamiento. Ha llegado a la entrada del centro penitenciario en la furgoneta de un medio de comunicación catalán, y antes del encuentro ha asegurado estar tranquilo, que ha dormido muy bien y que no tiene intención de discutir con Caride Simón.
Asimismo, ha explicado su intención de no estrechar la mano "de quien ha matado a 24 personas". Manrique sí ha especificado que la primera pregunta que hará al etarra condenado por el atentado de Hipercor, que se saldó con 21 fallecidos y 45 heridos, es la misma que se planteó cuando se enteró de que el etarra era gallego: "¿Qué pinta un gallego en ETA?", algo que para él "no tiene sentido" y que mentalmente no le cuadra.
Ha explicado, que si la respuesta del etarra es "coherente", le hará más preguntas, aunque ha reconocido que no tiene ningún guión preparado. También ha comentado que le va a "mirar a los ojos".
Manrique ha llevado a la entrevista la carta que le envió Rafael Caride en la que reconocía el "daño y el sufrimiento" causado, y otra misiva que firmó en 2010 con otros siete etarras que se desvincularon del colectivo de presos de ETA.
El que fuera presidente de la Asociación Catalana de Víctimas de Organizaciones Terroristas (ACVOT) ha explicado que acude a esta reunión con el ánimo de fomentar la división interna que existe entre los miembros de ETA y con el objetivo de que los etarras que siguen en la línea oficial y no se han desvinculado de ETA se den cuenta "de que hay otras formas de hacer las cosas, cumpliendo la legislación".
Sobre las críticas de otras víctimas a este tipo de encuentros, ha dicho que las respeta pero que no las entiende, porque a él no le han preguntado los motivos por los que acude a la cita. "Poca gente me tiene que dar lecciones de cómo tengo que hacer las cosas", ha sentenciado.
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