Abiertos al tráfico los túneles de la variante

PASAIA. DV. A las 10.30 de la mañana de ayer se procedió a abrir al tráfico los dos túneles de la variante de Pasaia como parte del proyecto de bulevarización de la travesía de la N-I a su paso por Pasaia Antxo. En el acto estuvieron presentes Eneko Goia (diputado de Infraestructuras Viarias), Arantza Tapia (diputada de Movilidad y Ordenación del Territorio) y Luis M. Apraiz (director general de Carreteras).

La apertura al tráfico del tronco de la variante de Pasaia, que enlaza la carretera N-I con la A-8, supone según la Diputación «una mejora drástica para los habitantes de Pasaia: la nueva carretera trasvasará 25.000 vehículos diarios desde la travesía de la N-I por Pasaia al tramo ampliado a tres carriles de la A-8 (Pasaia-Intxaurrondo) y permite abordar el proceso de bulevarización de Pasaia Antxo».

La Diputación ha invertido 47 millones de euros en su construcción, una nueva carretera de 2 kilómetros de longitud y calzada de 4 carriles (dos por sentido), que tendrá un tráfico total de 40.000 vehículos diarios: los 15.000 vehículos que usaban el trazado anterior y los 25.000 que se trasvasarán desde la N-I.

Descripción de la obra

El objetivo es desviar tráfico desde la travesía de la N-I por Pasaia Antxo hasta la A-8. Para ello, se utiliza en parte la actual conexión y, dado que se prevé que el tráfico en esa zona pase de 15.000 vehículos/día a unos 40.000, se mejora todo el tramo, construyéndose dos túneles y dos rotondas.

La obra consiste en 2 kilómetros de conexión prácticamente nueva entre el actual acceso a Pasaia Antxo y la variante de Errenteria, que enlaza con los 2 kilómetros de ampliación a tres carriles de la A-8 entre Intxaurrondo y Pasaia, en servicio desde 2005.

Paralelamente, la Diputación Foral de Gipuzkoa invertirá 1 millón de euros en la instalación de dispositivos de control y seguridad y refuerzo del alumbrado de la variante de Pasaia. El dispositivo incluye un sistema de programación y control remoto de las instalaciones del túnel de Molinao que podrá ser controlado desde el centro de control de túneles de Belabieta, así como el refuerzo del alumbrado del túnel de Molinao y la instalación de alumbrado en el bidegorri que conecta Antxo con Beraun.

La Diputación señala que «las obras de la fase de culminación comenzaron en diciembre de 2005 y se están desarrollando de acuerdo con el programa. En esta fase se ha construido el enlace de Beraun, el enlace de Molinao, el túnel de conexión del enlace de Molinao con la variante de Errenteria, un falso túnel y el cruce bajo el ferrocarril de euskotren. Igualmente, se ha ejecutado de manera prioritaria el acceso peatonal entre los municipios de Pasaia y Errenteria que discurre paralelo a la N-I (acera y bidegorris de la glorieta de Capuchinos hasta el túnel de Capuchinos, incluida la revegetación del talud)».