
La crisis del consumo y de la construcción sigue pasando factura a Fagor Electrodomésticos. La cooperativa cerró el primer semestre del año con unas pérdidas de 66,8 millones de euros, lo que supone tres veces más que los 22,5 millones de euros de número rojos registrados en el mismo periodo del año pasado.
Según la información facilitada a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CMNV), la cifra de negocio del grupo en el primer semestre ascendió a 491 millones de euros (609 millones de euros en el primer semestre del 2012), lo que supone una disminución del 19% respecto al mismo periodo del año anterior. Todo ello a pesar de que la caída del sector de electrodomésticos en España se haya situado este año en el 6,8%, frente al desplome del 16% registrado en 2012.
El problemas es que otros mercados clave para el grupo, como lo son el francés y el polaco, no dan señales de reactivación. Las ventas en Francia se han deteriorado al caer un 7,7%, frente al descenso del 2,1% del mismo periodo de 2012. Polonia, por su parte, baja un 1,4%.
De esta manera, los malos resultados de 2013 han seguido obligando a uno de los buques insignia del Grupo Mondragón a continuar con las medidas paliativas: reducción de los anticipos laborales, renuncia a pagas extras, calendarios flexibles, reubicaciones, prejubilaciones, contención de gastos y medidas de reindustrialización. Así, por ejemplo, la plantilla media se ha reducido a 5.642 empleados, frente a los 6.998 del año anterior.
Además, la corporación Mondragón se ha visto obligada a destinar un préstamo de 70 millones para apoyar a Fagor en su plan de reestructuración, adaptación a la nueva situación de los mercados y tensión financiera.
El grupo cooperativo efectuó en este primer semestre del año un saneado de sus cuentas con una dotación de 37 millones contra los resultados de 2012. Asimismo, la inversión en I+D+i alcanzó los 10,8 millones de euros durante los seis primeros meses del año.