Borrar
Actualmente, la tolosarra Ane Urbizu cursa sus estudios superiores de acordeón en Musikene.
Ane Urbizu gana el Certamen Estatal del concurso Arrasate Hiria en la categoría sénior

Ane Urbizu gana el Certamen Estatal del concurso Arrasate Hiria en la categoría sénior

En la XXXVII edición, ha sido la única participante euskaldun dentro de su categoría, en un concurso que ha resultado un «pequeño empuje para seguir trabajando

ELENE ARANDIA

Miércoles, 4 de enero 2017, 00:46

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

El talento y versatilidad de Ane Urbizu (Tolosa, 1995) ha conquistado al jurado de la XXXVII Edición del Certamen Estatal del concurso de acordeón Arrasate Hiria. La tolosarra acaba de hacerse con el primer puesto en la categoría sénior compitiendo como única acordeonista euskaldun dentro de su categoría, un concurso de renombre y tradición para los acordeonistas, el cual comenzó a celebrar sus primeras ediciones en el municipio. El primer premio está recompensado con diploma, trofeo y 800 euros. En el podio le acompañó la catalana Queralt Morral y el tercer premio quedó desierto.

Desde hace cuarenta y dos años Hauspoz Euskal Herriko Akordeoi Elkartea (antes Confederación Vasca de Acordeón) ha trabajado con el fin de fomentar el estudio del acordeón y elevar el nivel acordeonístico, interpretativo y pedagógico existente en el País Vasco, hasta tal punto de que entre las tres modalidades del Concurso, la Internacional es considerada a día de hoy uno de los tres más importantes del mundo.

Cuenta la tolosarra que una de las particularidades del concurso es el amplio repertorio. «Se valoran mucho los repertorios formados por obras de épocas y estilos diferentes, lo que te hace sacar tu lado más polifacético, capaz de interpretar cualquier tipo de música, una cualidad muy preciada en un músico. Por todo ello, este año he apostado por hacer un recorrido por la música barroca del siglo XVII hasta obras más contemporáneas: 'Izpi' de Z. F. Gerenabarrena, 'Alone' de E. Jokin, 'Preludio y Fuga' de J. S. Bach, 'Cadenza' de S. Gubaidulina y 'Suite' de J.S. Bach. Para finalizar, toqué 'Tango' de I. Stravinsky, transcrita por mí para acordeón».

Es el primer galardón que obtiene la acordeonista, un premio que considera particularmente especial al obtenerlo en casa. «Participo en él desde que tenía nueve años y lo conozco muy bien. Siempre que he podido lo he hecho, como oyente, como ayudante detrás del escenario... Ha sido muy emocionante conseguir este primer premio», señala Urbizu.

En la primera fase, que tuvo lugar el pasado 9 de diciembre, los participantes interpretaron una obra obligada de diez minutos de duración, 'Farewells', de A. Kusyakov. Posteriormente, el 11 de diciembre tuvo lugar la segunda fase y el nombramiento de los ganadores, para la cual durante media hora las obras obligadas fueron de J.S.Bach y otras libres. El jurado estuvo compuesto por David Gordo, el francés Philipe De Ezcurra y el serbio Nikola Pekovic.

«El concurso ha sido una prueba personal para mí. Tenía bastante claro que el repertorio que iba a tocar sería este. Comencé a primeros del mes de junio, y contaba con 5 o 6 meses para prepararlo. Aunque pueda parecer mucho tiempo, preparar un repertorio de este nivel requiere mucho tiempo; trabajando día a día llegué a conseguirlo y estoy muy satisfecha con el trabajo realizado. El concurso me ha enseñado que voy por buen camino, y ha sido un pequeño empuje para seguir trabajando», añade.

La tolosarra comenzó sus estudios en la escuela de música municipal de Tolosa a los ochos años de la mano de los profesores Amaia Lizaso y Koldo Tarragona, donde afirma «existe una muy buena cantera». Tras diez años optó por seguir sus estudios de acordeón en Musikene y actualmente realiza su tercer curso en la especialidad de intérprete de acordeón. «Me pregunto muchas veces por qué habré escogido este instrumento y no otro, ya que en un primer momento pensaba en muchos y no sabía por cuál decantarme. He sido la única euskaldun en mi categoría; lo vemos normal, ya que con el tiempo muchos lo dejan de lado y solo muy pocos seguimos adelante. En nuestra familia somos bastantes músicos y es verdad que al juntarnos todos siempre hemos tenido un hueco para la música. Recuerdo que cuando era niña, mientras los demás cantaban, mi tía los acompañaba tocando el acordeón», cuenta.

La acordeonista se muestra esperanzada de cara al futuro; su mente está centrada en seguir adelante con los estudios, y afirma que seguirá unida a su instrumento y al mundo del acordeón.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios