Secciones
Servicios
Destacamos
JUANTXO UNANUA
Martes, 19 de julio 2016, 00:42
Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.
Compartir
La pequeña campana de la ermita de san Gregorio del barrio de Astigarreta volvió a tañer en repique alegre, tras permanecer durante décadas enmudecida. La llamada a la fiesta se escuchaba prácticamente desde el arranque del primer y duro repecho que parte de la zona trasera de la Venta de Mandubia. La txalaparta, tocada por los hermanos Eskisabel, cogió el testigo dejado por el campanil, atrayendo a mucha gente hasta la explanada de la ermita, del propio Astigarreta cómo no, de Garín, de Beasain...
Una remozada y rehabilitada ermita de San Gregorio esperaba a los que hasta allí llegaron, y se quedó pequeña. A las 12.00 del mediodía recuperó el culto a través de la misa celebrada por el obispo José Ignacio Munilla, acompañado del sacerdote ordiziarra Bernabé Arizmendi.
En la fiesta hubo representación municipal beasaindarra -cabe recordar que desde 1929 Astigarreta forma parte del municipio- con el alcalde, Aitor Aldasoro, y la edil Encarni Arrieta y junto a ellos y atendiendo a todo y a todos, para que no faltara nada, el regidor o alcalde pedáneo de Astigarreta, Antonio Etxaniz.
Tras el oficio religioso llegó el sabroso hamaiketako al tiempo que los trikitilaris Olarte ambientaban la fiesta.
Satisfacción vecinal
Los de Astigarreta estaban felices tras ver recuperado parte de su patrimonio, entre ellos Pilar Mujika, autora del cuadro colocado en un lateral del altar, que refleja la imagen de San Gregorio que acogía el pequeño retablo y que fue robada en 1983. La fiesta se alargó hasta el atardecer.
Cabe recordar que hasta superada la década de los sesenta del pasado siglo, al romería se celebraba el segundo domingo de Pentecostés.
La ermita ha acogido diferentes obras de reparación, por ejemplo en 1951. Más adelante, en 1993, en el mes de julio, un grupo de jóvenes voluntarios beasaindarras con la ayuda del Ayuntamiento rehabilitaron la ermita. Desde entonces ha estado abandonada y es ahora cuando se ha reformado el tejado y en el interior se han pintado y adecentado el altar y las paredes.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.