Borrar
Las 10 noticias clave de la jornada
Según el estudio, cuanto más habituado se está a la marihuana, más dificultades se tienen para recordar experiencias.
El cannabis genera falsos recuerdos

El cannabis genera falsos recuerdos

Investigadores catalanes descubren que los fallos de memoria asociados al consumo de marihuana llegan incluso a modificar las experiencias vividas

Fermín Apezteguia

Domingo, 6 de septiembre 2015, 11:59

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Un equipo formado por científicos del Instituto de Investigación Biomédica del Hospital de San PAu y de la Universidad Autónoma de Barcelona ha descubierto nuevos daños en la salud mental provocados por el consumo de cannabis. Hasta ahora, desde hace muchísimos años, se sabía que una consecuencia clásica del uso de este estupefaciente eran y son los fallos en la memoria. Cuanto más habituado se está a la marihuana, más dificultades se tienen para recordar situaciones, experiencias. El trabajo catalán ha dado un paso adelante en el estudio de los problemas cognitivos causados por esta sustancia y ha descubierto que sus consumidores tienen una mayor propensión a experimentar falsos recuerdos.

El problema, según cuentan, no se da en las personas que se fuman un porro de manera recreativa muy de vez en cuando, en una cena o una juerga especial. Los fallos en los recuerdos, y en la capacidad para retener información, dos actividades cerebrales muy relacionadas, pero diferentes, aparecen en los consumidores crónicos de cannabis.

Todas las personas, a partir de determinada edad, 45 ó 50 años, comienzan a tener pequeños problemas de memoria, que no tienen por qué ser preocupantes. Uno se olvida de dónde ha dejado las llaves, pierde de repente el nombre del compañero de trabajo que tiene en frente o comienza a tener dificultades para llamar a las cosas por su nombre. La mayoría de esas situaciones se deben al estrés, aunque también al proceso de envejecimiento, que según el catedrático de Fisiología Humana Francisco Mora comienza a partir de los 30 años.

Como cuando somos niños

Pacientes psiquiátricos y altos consumidores de hachís sufren este tipo de enredos en los recuerdos con más frecuencia y mucha mayor medida. Los investigadores catalanes, que han publicado su estudio en la revista 'Molecular Psychiatry', comparan los efectos del cannabis en la memoria con las experiencias vividas en la primera infancia, según informaron a través del servicio de noticias SINC, del Ministerio de Economía. "Un fenómeno habitual es tener falsos recuerdos de situaciones vivividas en la infancia y que creemos recordar porque las personas de nuestro entorno nos las han contado en infinidad de ocasiones", explicó un portavoz del grupo investigador.

El equipo llegó a esta conclusión después de realizar una simple prueba con un grupo de pacientes formado a partes iguales por consumidores crónicos de marihuana y por personas sanas. A todos ellos se les pasó una serie de palabras que debían aprender; y con posterioridad, pasados unos minutos, recibieron primero los términos originales con otros relacionadas semanticamente; y luego con unos terceros que no lo estaban.

Los consumidores de cannabis presentaban muchos más fallos de memoria. Creían en mayor medida que el llamado grupo control había visto palabras que era la primera vez que se les presentaba. Un estudio de imagen con resonancia magnética detectó con posterioridad que el grupo de los grandes consumidores presentaba menor activación en las áreas del cerebro asociadas al procesamiento de los recuerdos. El estudio detectó este tipo de carencias incluso entre los participantes que habían abandonado el consumo de droga un mes antes de la prueba.

Testimonios en tela de juicio

Los investigadores creen que este hallazgo tendrá importates implicaciones, especialmente en el ámbito judicial, "por las consecuencias que podría tener en las declaraciones de testimonios y víctimas". Desde el punto de vista médico, se cree además -aunque éste quizá sea un aspecto que requiera una investigación más profunda- que el consumo de marihuana podría acentuar los problemas de memoria asociados al envejecimiento.

Algunas voces, como la del investigador Manuel Guzmán, biólogo molecular de la Universidad Complutense de Madrid, defienden que el consumo de marihuana en personas adultas no destruye neuronas, porque no es neurotóxico. "Tampoco banalizo los riesgos del consumo de determinadas sustancias sobre la salud mental. En algunos individuos -admite- existe el riesgo de psicosis y fobias". La reconocida investigadora y psiquiatra clínica Ana González-Pinto, del hospital universitario Santiago, de Vitoria, tiene constancia de ello y va más allá en la advertencia. Su experiencia le ha demostrado que el consumo en menores de 18 años, con el sistema nervioso central aún en formación, tiene efectos devastadores. La toma regular de cannabis afecta a la memoria, provoca pérdida de inteligencia y favorece la aparición de enfermedades mentales graves. Dos de cada tres pacientes atendidos por psicosis son consumidores de esta sustancia. Muchos de ellos, según relata, acaban desembocando en esquizofrenia, que es la forma más grave de pérdida de contacto con la realidad.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios