Un sistema con siete subcentrales y más de tres kilómetros de tuberías

Cada subcentral dispone de un grupo de intercambiadores para calefacción y agua caliente, que luego distribuyen a las viviendas. Todo el sistema está telegestionado de manera que cada zona de viviendas -pisos de diferentes medidas y villas- tiene consignado sus propias temperaturas según sus necesidades. La instalación funciona durante todo el año con el fin de cubrir las demandas de calefacción (8 meses/año) y de agua caliente (todo el año) de las casas.

Dentro de la red de distribución está la red principal, correspondiente al circuito que conecta la central con las subcentrales; una red secundaria para agua caliente sanitaria y otra red secundaria para la de calefacción. Gran parte de la tubería del anillo principal de distribución se encuentra situada en una galería técnica enterrada, que recorre el complejo urbanístico por la carretera. La red de distribución tiene casi dos kilómetros enterrada y 1,2 kilómetros colgada en los forjados de los porches, lo que suma más de tres kilómetros.

A lo largo de su historia han sido bastantes las comunidades de vecinos vascas y de otras autonomías las que se han interesado por su funcionamiento y, sobre todo, por la reducción de costes. Entre ellos, el futuro District Heating del nuevo Txomin Enea.