Borrar
Las 10 noticias clave de la jornada
El tatuador fue detenido el martes por agentes de la Guardia Municipal de San Sebastián.

Ver fotos

El tatuador fue detenido el martes por agentes de la Guardia Municipal de San Sebastián. Arizmendi

Ingresa en prisión el tatuador de Donostia acusado de abusos sexuales

La juez que lleva el caso ha tomado declaración esta mañana al detenido por las quince denuncias presentadas hasta ahora

el diario vasco

Jueves, 8 de febrero 2018, 15:50

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

El viaje del miércoles del tatuador donostiarra acusado de acoso y abusos sexuales a clientes desde los calabozos de la Guardia Municipal a los del Palacio de Justicia de Duque de Mandas fue en balde. La titular del Juzgado de Instrucción número 2 de San Sebastián acordó la devolución del arrestado a las dependencias policiales tras prorrogar su detención. Lo hizo porque, antes de adoptar cualquier medida sobre su situación procesal, deseaba escuchar el testimonio de varias afectadas por el investigado. Pero esta mañana la juez ha ordenado el ingreso en prisión del detenido tras volver a tomarle declaración. El sospechoso permanecía detenido en los calabozos de la Policía Municipal desde el pasado lunes.

La lista de víctimas que han decidido dar a conocer ante las autoridades su experiencia crece según van pasando los días. Este jueves eran quince las personas que han interpuesto ya una denuncia contra el tatuador y fuentes cercanas a la investigación afirman que las próximas horas podrían formalizarse más.

El arrestado fue conducido poco antes del mediodía del miércoles desde la sede de la Guardia Municipal hasta las celdas del Palacio de Justicia de Atotxa. Allí permaneció hasta primera hora de la tarde, momento en el que la autoridad judicial determinó prorrogar la detención y ordenó que fuera trasladado nuevamente a las dependencias policiales.

El motivo de esta decisión, según fuentes jurídicas consultadas, obedecía al deseo de la autoridad judicial de conocer el testimonio de varias de las presuntas víctimas antes de pronunciarse sobre el futuro del investigado.

Está previsto que comparezcan ante la jueza que lleva el caso varias de las mujeres denunciantes

El tatuador, por lo tanto, ha sido conducido este jueves por la mañana nuevamente a la sede del Juzgado de Guardia, donde ha prestado declaración sobre las imputaciones de las que ha sido objeto. La jueza ha dictado prisión provisional contra el arrestado.

Comparecencia de denunciantes

También está previsto que este jueves comparezcan varias de las mujeres denunciantes, casi todas las jóvenes que fueron clientas suyas en el negocio que ha venido regentado durante el último año y medio en la calle Iñigo de la Parte Vieja de San Sebastián. No obstante, también hay víctimas a las que el acusado dio clase en la escuela de tatuaje del barrio donostiarra de Gros, de donde el acusado fue expulsado por su inadecuado comportamiento.

Una semana después

Los hechos se conocieron la semana pasada, después de que una de las víctimas relatase su experiencia en las redes sociales. La denuncia se hizo viral y generó multitud de condenas a la vez que otras personas admitieron en las mismas plataformas de internet haber sido objeto de diversos tocamientos por parte de este mismo individuo.

El rechazo que el caso ha suscitado hizo que la fachada del negocio que el sospechoso regenta en la calle Iñigo, en la Parte Vieja de la capital, fuese atacado con pintadas. Durante la madrugada del pasado viernes, desconocidos escribieron en las lunas del escaparate las palabras «acosador» y «cerdo», así como la expresión «Alde hemendik» (Fuera de aquí).

La mujer que ha destapado este caso «colgó» un texto en su perfil en donde relató las circunstancias en las que presuntamente se perpetraron los hechos. «Hoy he sido acosada sexualmente por mi tatuador», escribió. Desveló que en el transcurso de la sesión, «desde el minuto uno» tuvo que escuchar por boca del mismo individuo comentarios de índole sexual. Indicó además que le había «agarrado del culo» y sujetado de la «cadera desnuda».

Otras de las víctimas fue una joven de 21 años, alumna de una escuela de tatuaje de Donostia a la que el acusado le besaba en el hombro, le tocaba el pelo, la cara, la cintura y le dirigía expresiones tales como que necesitaba una mujer «con más fuego, más ardiente».

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios