Un paseo por las fuentes de Ulia

El agua un recurso natural muy apreciado, que circula por una red subterránea, y que actualmente sirve para quitar la sed a los senderistas que recorren los caminos de Ulia a través de diferentes fuentes que son como los nacederos de los ríos. Las manos humanas, algunas anónimas, con el apoyo de modestos equipamientos, han ayudado para poder beber de esos manantiales. «Algunas son naturales y otras semiurbanas. Se puede completar un recorrido pasando por todas las fuentes que he contabilizado», explica el experimentado montañero Jesús Mari Alquézar, que ofrecerá el domingo 19 de marzo una excursión por este rico patrimonio.

El itinerario, un cómodo diente de sierra, comienza en la iglesia del Corazón de María situada en el barrio de Gros, junto al extremo este de la playa de la Zurriola. «Tras las primeras escaleras del jardín, se sitúa la primera fuente urbana, donde el caminante podrá proveerse de agua para la excursión».

A partir de aquí, la fuerte de subida de Zemoria sitúa al montañero en el incomparable mirador de la ciudad de Arbola-Iradi. En el primer cruce seguirá a la izquierda, ya en el Talaia ibilbidea (señalizado) que, tras cruzar Loitzikiko erreka y bajo una bóveda de árboles, se asoma al océano en el mirador de Monpas.

El camino, paralelo al litoral, alcanza la segunda gran fuente y la más popular de la que se cuentan misteriosas historias, la de la Kutraia, que consta de dos caños y del que solo uno mana el agua (el lavadero está actualmente inundado). Tras cruzar la calzada, 500 metros después, a 50 metros del sendero a la izquierda, «el ruido del agua delata la nueva fuente, Argi Ura, la tercera, producto de un deslizamiento de la anterior». Tras atravesar la pista del emisario, aparece a la derecha la cuarta, Barracas, apoyada por una tubería. Es el nacedero de una regata que se hunde hasta la cala Illurgita, donde deposita sus aguas. «El excursionista circula por el camino tradicional a media ladera hacia Pasaia. Cuando rodea la atractiva cala Illurgita, y a media subida hacia la ikastola Herri Ametsa, a la izquierda nace una senda, señalizada como 'litoral', que conduce en descenso hacia el mar, y junto a la borda de pescadores (Illurgitako kaxeta), aparece la quinta, la fuente lavadero 'Errotaxarko iturria'», explica Alquézar. Regresando a la senda litoral, y antes de los túneles de Aitzondo, una clara vereda conduce hasta el camino clásico y el Faro de la Plata. Pocos metros antes del faro, encontrará otra de las más famosas fuentes de Ulia, la sexta, del 'Inglés' o 'Ingleses', popularmente conocida también como la del 'Almirante', y que es nacedero de una de las quebradas más estrechas de Ulia, la 'Salkoko erreka'.

Nueve fuentes

Desde la plazoleta del Faro, se asciende en preciosa ruta hasta la cima del espolón cimero coronado por restos bien conservados del fuerte del Almirante. Desde aquí seguirá el camino más ancho y directo que discurre por la vertiente Sur (pista) ofreciendo una bella vista sobre las montañas y el corredor de Oarsoaldea. En la ikastola se recupera el camino de Santiago y por la senda que nace a la derecha en el caserío Urrutitxo se llega a la amplia cima, (área recreativa, restaurante) donde están la séptima y octava fuentes semi urbanas. Por la 'Atalaya de los Balleneros' y 'el molino', se alcanza la plazoleta, y a pocos metros a la derecha, aparece la novena y última, la del 'Albergue'.