Urkullu reclama «una nueva etapa de negociación política» en Cataluña

El lehendakari ha mostrado su "respeto" por la decisión de los magistrados del Tribunal Supremo, aunque ha señalado que mantiene "la esperanza de que, antes de la constitución del Parlament y de las sesiones de investidura, se adopten decisiones favorecedoras para abordar el futuro de Cataluña desde las vías políticas y no desde las vías judiciales y, menos, las penales". En ese sentido, ha asegurado que "le preocupa la actitud que está manteniendo la Fiscalía".

Urkullu recuerda en su entrada en las redes sociales que en noviembre ya declaró desde Canadá que "las elecciones del 21- D no eran una solución por sí solas. Pueden suponer un punto de inflexión si, en base a su resultado, se manifiesta con claridad una voluntad de dialogar, negociar y pactar sobre la realidad plurinacional del Estado". También se preguntó: "Si después de todo lo ocurrido se mantiene un respaldo claro a los partidos soberanistas, ¿qué van a hacer los poderes del Estado?".

El lehendakari trasladó entonces un "emplazamiento" al Gobierno español para que "manifieste, con claridad, un compromiso de negociación política sobre un nuevo modelo de encaje de las realidades nacionales basado en el concepto de soberanía compartida". A su juicio, "no habrá solución a la crisis catalana sin diálogo y acuerdo. Es necesaria una expresión de compromiso claro de negociación política a partir del resultado de las urnas". Apuntó que ese "diálogo" también fue reclamado en el dictamen del Tribunal Constitucional en su sentencia de 2014 sobre el Estatut de Cataluña.

"Hoy reitero esta declaración", ha asegurado Urkullu, que ha reiterado que "los poderes del Estado han de atender la voluntad expresa de diálogo manifestada desde Cataluña. Insisto también que este deseo debe comenzar por materializarse entre los propios partidos catalanes".

El lehendakari ha afirmado que "resulta muy difícil pensar en la constitución de un Parlament y la elección del president, de una manera mínimamente normalizada, sin restituir los escenarios previos al periodo de septiembre y octubre que culminó con la aplicación del artículo 155, que supuso la suspensión del autogobierno y la convocatoria de unas elecciones que, con una alta participación, dan cuenta de la pluralidad y voluntades del pueblo catalán".