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M. SÁIZ-PARDO
MADRID.
Viernes, 20 de octubre 2017, 07:48
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El vídeo se hizo viral. Un joven, aupado en un contenedor, propina una violenta patada en la cabeza a un guardia civil que intentaba detener a otro individuo que a su vez había pateado a otro funcionario caído al suelo. Todo ello, durante los disturbios que tuvieron lugar la tarde del 1 de octubre en un centro de votación en la localidad catalana de Sant Esteve de Sesrovires (Barcelona), al que había acudido un contingente del Grupo de Reserva y Seguridad (GRS) número 2 de Sevilla para impedir el referéndum.
Ayer, el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, tuiteó de nuevo ese mismo vídeo para anunciar en las redes sociales la detención de este agresor, después de que él mismo se entregara el miércoles en la comandancia de Sant Andreu de la Barca de Barcelona. El joven, de 22 años, ya había sido identificado y se había convertido en un objetivo prioritario de la Guardia Civil. Según informaron fuentes de la investigación, la mayor preocupación del arrestado es que su detención le perjudique en el futuro, ya que tenía la intención de presentarse a una oposición para ingresar en los Mossos d'Esquadra. El arrestado ha sido acusado de delitos de atentado a la autoridad, resistencia, desobediencia y amenazas.
Este joven es el tercer arrestado por los disturbios de Sant Esteve. La Guardia Civil ya detuvo a otro individuo que agredió con patadas a los agentes que habían caído al suelo y a un hombre de 25 años que trató de atropellar a varios funcionarios con una moto cuando se estaban retirando del dispositivo. Este último intentó arrebatar un arma a un guardia, según el Ministerio del Interior.
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