Patxi López pide «el voto útil» a su militancia para recuperar el partido

«¿Cómo vamos a enfrentarnos a la derecha si no estamos unidos», expresó López y propugnó «recuperar la lealtad, la fraternidad, y la confianza», aunque también mostró su malestar «por la agresividad y los insultos que reinan en el transcurso de la campaña». Y puso como ejemplo a otros partidos socialistas europeos, «en los que las grandes diferencias les habían conducido a la desaparición». En este sentido, López subrayó que «el objetivo del PSOE tiene que ser el de ganar a la derecha, no pactar con Podemos ni escorarse hacia el centro. Basta con mirar lo ocurrido en Francia, con una izquierda completamente irreal. Planteamos un proyecto de izquierdas, claro, nítido, capaz de trasladar seguridad y confianza».

El expresidente del Congreso dejó claro que la papeleta con su nombre llevará la palabra unidad, por detrás. «Unos quieren el voto útil para cargarse a Susana Díaz o a Pedro Sánchez. Pido el voto útil para salvar al partido socialista porque parte de nuestra vida está en esta formación». Juzgó la celebración del pasado Comité Federal «como la ruptura de un partido que rompía la vida de sus militantes». Una vez pasadas las primarias, López dijo que «iba a tratar de integrar todas las sensibilidades, todas las ideas».

Regular la economía

Por otro lado, durante su discurso, ante una numerosa presencia de militantes socialistas, López quiso recalcar que «es preciso recuperar el poder de la política hasta el punto de regular la economía y no dejarla en manos de especuladores que dejan en la calle a los trabajadores en la más absoluta pobreza. Vamos a derogar la reforma laboral del PP. Hay siete millones de trabajadores que no llegan a final de mes».El candidato vizcaíno puso el ejemplo del Gobierno de Ramón Rubial, que «en los años de plomo puso en marcha un Gobierno de todas las sensibilidades, para impulsar el Estatuto y para construir», o también el de Felipe González que «cuando gobernó transformó todo el país», o el de Zapatero, «en el que siguió solucionando todos los entuertos que le dejó el PP, sacándonos de la guerra, o el Gobierno Vasco con él de lehendakari, «en el que fuimos la esperanza dejando atrás la confrontación provocada por Ibarrretxe y acabando con el terrorismo».

En su intervención defendió «un partido más feminista», así como un «Estado en el que la educación superior sea más accesible, con un partido más europeísta capaz de ceder soberanía a Europa, y con un mayor peso de la Internacional Socialista. Tenemos que protagonizar los grandes debates de la izquierda, evitando la marcha de empresas a paraísos fiscales, más digitales, sosteniendo el Estado del Bienestar y especialmente creando empleo y riqueza».

Finalmente, expresó que nunca los socialistas vascos se han resignado, «cuando peor hemos estado hemos sacado más orgullo, hemos estado más comprometidos, más en al calle, recuperando el mejor partido socialista. Nosotros convertimos los compromisos en obligaciones. Un socialista vasco defiende sus principios e ideas hasta el final», concluyó en medio de aplausos.