Alonso aprovechará el pacto para reivindicar en su congreso la renovada influencia del PP

Su desafío desde que llegó a la presidencia del PP vasco hace año y medio fue consolidar a su partido como una fuerza «decisiva» e «influyente» en la Cámara de Vitoria. Y este acuerdo le acerca más a su objetivo. El PP escenificó ayer su primer golpe de efecto al afianzarse como socio del Gobierno Vasco para sacar adelante los Presupuestos, una vez que EH Bildu y Elkarrekin Podemos han quedado descartados de la negociación. Un trofeo político que el presidente del PP vasco llevará a su congreso regional para reivindicar la influencia que han logrado sus nueve escaños en el Parlamento autonómico.

El exministro de Sanidad lo venía verbalizando desde hacía tiempo: tenía la voluntad de conformar un acuerdo junto a los jeltzales con el objetivo de hacer crecer la economía y el empleo en Euskadi, siempre y cuando, eso sí, apostase por la «moderación» y eliminase a EH Bildu de la negociación presupuestaria. El respaldo de los populares a las cuentas vascas se convierte ahora en la primera prueba para poder calibrar hasta qué punto el entendimiento PNV-PP puede alcanzar un grado estable de sintonía en las políticas que reclaman los populares.

El acercamiento que hoy muestran ambos partidos no se representaba desde hacía casi dos décadas en el Parlamento. Exactamente desde 1998, cuando el PP fue decisivo por última vez en unos Presupuestos del PNV. En aquel momento, con el lehendakari Ibarretxe. El peso del PP fue quedando relegado a la sombra desde entonces, hasta que en 2009 facilitó con sus votos la investidura de Patxi López como el primer lehendakari socialista de la historia. Desde aquella legislatura, el PP no había sido decisivo en el tablero político vasco debido al reparto de escaños en el Parlamento, aunque los populares se sumaron a algunos acuerdos económicos entre el PNV y el PSE en la anterior legislatura.

El deshielo entre el PP y el PNV resulta hoy evidente, aunque ambas formaciones tratan de desvincular cualquier acuerdo entre el Gobierno Vasco y el PP de lo que pueda ocurrir en Madrid con las cuentas del Ejecutivo de Rajoy. El presidente del Gobierno necesita el apoyo de los jeltzales para sacar adelante sus Presupuestos, aunque, por ahora, ese hipotético respaldo aún está en fase de contactos.

Apoyo a la Ertzaintza

El PP vasco considera que la llegada de Alonso ha conseguido frenar la caída de su electorado y destaca que la actual aritmética parlamentaria refuerza su posición negociadora en comparación con la anterior legislatura. Por eso, Alonso llegará al cónclave del sábado reforzado para poder continuar con el reto de reconstruir su proyecto y así ampliar su representación en los rincones de Euskadi donde han perdido su presencia.

Lo hará con un equipo renovado dispuesto a revitalizar el proyecto de la formación. Y, a pesar de que la designación de la nueva secretaria general se lleva con secretismo, todo apunta a que el perfil de la vizcaína Amaya Fernández encaja a la perfección. Un argumento de peso es que Alonso le encomendara la redacción de la ponencia socio-económica. En cuanto a la ponencia política, el partido recogerá varias enmiendas presentadas por los compromisarios en las que se pone en valor el papel de la Ertzaintza, de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y de los escoltas privados. La ponencia recalcará, además, el carácter «foral, central y liberal» del PP vasco.