Borrar
Vacas y yeguas pastan en los pastos de Arritzaga, zona de las minas de Amezketa en Aralar, indiferentes al paso de un grupo de mendizales
Tras el misterio de los seles

Tras el misterio de los seles

Miles de cabezas de ganado eran alimentadas en las zonas delimitadas por los seles, espacios en los que los ganaderos gozaban de protección y derechos

ELISA BELAUNTZARAN

Jueves, 20 de abril 2017, 12:34

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

El tiempo ha hecho que muchos hayan desaparecido o al menos hayan caído en el olvido, pero los seles fueron claves en la ganadería vasca. Se trataba de claros en el bosque para recoger ganado y era conocidos en euskera como sarobe, saroi, korta...

La ...

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios