Vivienda recurre a pisos municipales para ampliar su parque de alquiler social

El primero con el que ha alcanzado un acuerdo es Lasarte-Oria. El consejero firmó ayer un acuerdo con el alcalde del municipio, Jesús Zaballos, para la cesión a Alokabide de 16 viviendas. Es el primer ejemplo del denominado 'bizigune municipal', una modalidad alternativa por la que el Gobierno Vasco quiere incorporar al parque público general y gestionar hasta 150 viviendas propiedad de consistorios que «en muchos casos están vacías, reservadas a otros fines o se dedican al alquiler social» con requisitos específicos en los que el municipio asume «la mayor parte del coste y del riesgo del arrendamiento».

El Ejecutivo de Vitoria cree que el nuevo programa «desahoga» a los ayuntamientos más pequeños de la gestión de esos alquileres, que pasan a manos de Alokabide «en todos los aspectos» y a estar bajo las condiciones generales de la CAV, salvo la posibilidad de que los ayuntamientos «incluyan el empadronamiento», en este caso en Lasarte-Oria, como un requisito extra. «La cesión en el 'bizigune municipal' se realiza por un periodo de 6 años prorrogables, en los que los consistorios recibirán un canon mensual de arrendamiento, similar al que reciben los particulares que prestan sus viviendas a Bizigune, con un máximo de 600 euros de renta mensuales», explicó ayer la consejería. «Me gustaría animar a todos los ayuntamientos que disponen de viviendas vacías e incluso a los que ya las gestionan desde la órbita municipal a confiar en Alokabide y sumarse al programa», indicó Arriola.

El departamento lanzó el pasado año una campaña para sumar a Bizigune 700 viviendas vacías en 2017, otras tantas este año y entre 800 y 1.000 más cada año hasta 2025, con el fin de alcanzar en esa fecha la cifra de 8.000 viviendas particulares cedidas a este programa de alquiler social y cubrir a través de él los casos de derecho subjetivo que se vayan reconociendo.

El reto no se ha logrado. De hecho, reconocen en el departamento, la clave está «en mantener lo que tenemos» y que los pisos que se habían incorporado no se vayan al alquiler libre o turístico tentados por las altas rentas del mercado. La oferta del Gobierno Vasco, que ha subido hasta 600 euros la renta máxima para los propietarios, se basa «en las garantías» y «seguridad» a la hora de cobrar, de recibir su casa tal y como la dejó o de despreocuparse de las gestiones del alquiler, animan las fuentes consultadas.

Alokabide gestiona en este momento 12.523 viviendas en alquiler en todo Euskadi. De ellas, más de 4.100 son de su propiedad, 3.306 del Gobierno Vasco, 4.639 pertenecen a Bizigune, 260 al programa Asap y 149 son propiedad de diversos ayuntamientos.