Ocho de cada diez usuarios de la red foral de bidegorris de Gipuzkoa son hombres

La diputada foral de Movilidad, Marisol Garmendia, comentó ayer al respecto que «de alguna manera tenemos que darle una vuelta a esta circunstancia». La tarea ya ha empezado. «El año pasado empezamos a trabajar con colectivos como Kalapie para ir fomentando el uso de la bicicleta entre las mujeres». Se refirió al encuentro '200 Emakume Bizian' en el que se celebraron charlas, talleres y una marcha ciclista para impulsar el uso de la bicicleta entre las mujeres.

Anunció que su departamento seguirá con este tipo de iniciativas porque «es fundamental buscar la igualdad y visibilizar a las mujeres ciclistas». «Van en aumento pero tenemos que conseguir más», concluyó. No obstante, matizó que el dato se refiere a la red foral -los municipios tienen sus propios bidegorris- y se mostró segura de que «las mujeres usan más las vías urbanas».

Aunque sigue siendo bajo, el porcentaje femenino sube hasta el 24% en el perfil de usuario de bidegorri que utiliza la bicicleta para realizar su desplazamiento cotidiano. Este grupo lo componen quienes ya han dado el salto a la movilidad más sostenible para el trabajo, los estudios, las gestiones o las compras diarias, y supone el 28% del total de ciclistas. En este sector, el más fiel a la bici, la proporción es de un 76% de hombres y un 24% de mujeres.

Con todo, la finalidad del bidegorri siguen siendo mayoritariamente el deporte y el ocio. El 72% de usuarios responde a alguna de estas dos motivaciones. Y en este amplio grupo, el 88% son hombres.

De los datos arrojados ayer por el departamento foral de Movilidad se desprende asimismo que el perfil de usuario de bidegorri ya peina canas. La edad media se sitúa en 47,4 años y llama la atención que la presencia de menores de 25 años represente un 13% de los ciclistas que se mueven por estas vías, porcentaje superado por el 16% que suponen los mayores de 65 años.

En el capítulo de valoraciones, los usuarios puntúan con un 7,6 de media la red foral, dando un 8,2 a la seguridad y un 6,5 a la convivencia entre ciclista y peatón.

Más ayudas a municipios

Al margen de los datos sobre los usuarios de bidegorris, la Diputación quiso lanzar ayer el mensaje de que a través de la promoción de este tipo de infraestructura viaria, pretende ligar la gestión de la movilidad con conceptos de mayor peso como la salud y la sostenibilidad. El discurso no se sostiene sin fondos, por lo que la institución foral ha anunciado que doblará este año el presupuesto destinado a construir bidegorris y fomentar el uso de la bici como medio de transporte. En 2018 invertirá 5 millones de euros, frente a los 2,3 gastados el año pasado.

La comparecencia de ayer de Marisol Garmendia coincidió con la publicación en el Boletín Oficial de Gipuzkoa del anuncio de licitación de las obras del tramo Jaizubia-Amute de Hondarribia, un proyecto que Gipuzkoa comparte con Pirineos Atlánticos y Navarra dentro de la colaboración transfronteriza. El valor del contrato asciende a 1,3 millones.

También este año se prevé acometer el segundo tramo del bidegorri Lezo-Pasai Donibane -ya tiene su primera fase finalizada- con un presupuesto de 970.000 euros, construir la conexión Azpeitia-Urrestilla (830.000 euros) y ejecutar una vía ciclista entre Eibar y Maltzaga (1,5 millones). Garmendia también puso en valor que la Diputación destinará este año 150.000 euros a ayudas a los ayuntamientos para financiar bidegorris locales, lo que supone duplicar esta partida que en 2017 alcanzó los 75.000 euros, contribuyendo a acometer nuevas vías en Lazkao, Aretxabaleta y Anoeta.