Nieve en mayo, ¿un hecho excepcional?

La nevada, pese a que había sido pronosticada, no dejó de sorprender, máxime cuando parecía que el invierno había quedado ya atrás.

Y todo porque el mes de abril tuvo un comportamiento poco habitual. Fue cálido y solo en el tramo final el mercurio empezó a caer. En el emblemático centro meteorológico del monte Igeldo, donde se registran datos desde el año 1928, la temperatura media fue 11,8º, cuatro décimas por encima de lo normal. En Hondarribia no llegó a tanto y se quedó a cinco décimas de la media.

Abril, con temperaturas muchos días por encima de los veinte grados, prácticamente abrió la temporada de playas. Los arenales recibieron a los primeros bañistas ávidos de sol. Algunos se atrevieron incluso a darse un chapuzón.

El mes fue tan luminoso que el número de horas de sol en Igeldo fue de 240 mientras que en Hondarribia alcanzaron una cifra similar, 236. Se trata de un incremento del 25% de insolación.

Con estos antecedentes, por lo tanto, la nieve de primeros de mayo supuso un notable contraste. Pero por sorprendente que pueda parecer, tampoco es excepcional que se produzcan nevadas en esta época del año. En 2016 sucedió lo mismo. El primero de mayo, algunas cumbres amanecieron cubiertas de un manto blanco en el macizo de Aralar, en la muga con Gipuzkoa. Las bajas temperaturas y las precipitaciones caídas fueron suficientes para que la estampa primaveral de jornadas anteriores se transformara en una imagen plenamente invernal que casi habíamos olvidado. Fue una capa muy fina que para el mediodía se había ya derretido nieve ya había desaparecido. Entonces, la nieve también cubrió otros montes de la zona, entre ellos el de San Donato, de 1.493 metros de altitud.

Mínimas propias de febrero o marzo

Aquella noche, al igual que la de este primero de mayo, fue fría en todo el País Vasco. Se registraron mínimas propias de febrero o marzo. En Aretxabaleta, por ejemplo, el mercurio descendió hasta los 2,5 grados, mientras que en Beasain se midieron 4,6º. En localidades del Baztan se alcanzaron 3,4º, por 3,7º en Pamplona. « grados.

Desde el propio santuario de Aralar reconocieron que la nevada no fue una excepción. «No es la primera vez que algo así sucede. Tampoco voy a decir que se trata de un hecho que ocurre todos los años, pero sí de vez en cuando», señalaron desde el santuario.

En este sentido, recordaron que un 8 de mayo, jornada en la que se conmemora la aparición de San Miguel, los fieles que desde Uharte Arakil ascendieron hasta al santuario lo hicieron con nieve que les llegaba hasta las rodillas.