El coloso del asfalto ya recorre Gipuzkoa

El primer examen se pasó nada más salir del puerto. El 'megatruck' tuvo que realizar una maniobra complicada en la rotonda que da acceso a Lezo, cogiendo directamente la Gi-636 en dirección a Errenteria, tras una maniobra de más de media hora hora. Para poder enfilar la carretera de la manera más adecuada se cambiaron las cabezas tractoras de dirección de modo que la parte de atrás del 'megacamión' se convirtió en la zona delantera. De esta manera, pudo adentrarse en la vía secundaria que le llevó hasta el punto de destino.

Una vez incorporado a la Gi-636, el 'megatruck' realizó varios kilómetros hasta llegar al polígono de Lintzirin. Su llegada estaba prevista para las 03.00 horas. El transporte permanecerá en este punto hasta la noche de mañana, una exigencia técnica por las «dificultades extraordinarias» de la estructura. Entonces, volverá a arrancar. «Discurrirá principalmente por carreteras locales y habrá que adecuar la configuración del megacamión por las curvas que tiene el recorrido. Por ello, y para poder llevar a cabo dichas adecuaciones, esta noche no realizará desplazamiento alguno», explicó la semana pasada Ain-tzane Oiarbide, la diputada de Infraestructuras Viarias.

La imagen del 'megatruck' circulando por varias de las carreteras de Gipuzkoa evoca a la del camión que el pasado mes de noviembre transportó también un aerogenerador hasta una empresa especializada a la localidad navarra de Sangüesa. Entonces tuvo que recorrer los 60 kilómetros que separan el puerto de Pasaia del alto de Etzegarate pero necesitó tres etapas para realizarlo. Además, estuvo parado durante varios días en una báscula de la Diputación de Gipuzkoa porque carecía de los permisos necesarios para circular por la Comunidad foral. La Diputación anunció ayer a este periódico que el regreso de ese transporte está previsto para julio.

En el transporte que estos días trastoca la circulación por Gipuzkoa, el reto es aún más complicado. Aunque el volumen es menor tanto en tonelaje como en envergadura, el que transporte salió ayer del puerto de Pasaia con sus 98,100 metros de longitud, será «el más largo jamás visto por nuestras carreteras», explicó la diputada Oiarbide el día en el que explicó cómo iba a ser el itinerario.

El pasado sábado este visitante tan inusual que están teniendo las carreteras de Gipuzkoa ya pasó su primera prueba de fuego. Una operación estudiada al milímetro permitió descargar en el puerto los dos transformadores de gran tonelaje. Minutos antes de las dos de la tarde comenzaron las tareas para el desembarco de una carga muy poco habitual. Las maniobras requirieron de seis horas de trabajo ininterrumpido y de la intervención de más de una treintena de operarios.

Segundo tramo

La segunda etapa se llevará a cabo por la Gi-2134, que discurre entre Oiartzun y el barrio de Ventas de Irun. El 'megatruck' partirá de Lin-tzirin a las once de la noche de mañana y se prevé que llegue a su destino a las 07.00 horas del jueves. Necesitará ocho horas para realizar un recorrido que consta de doce kilómetros. Esta última etapa será la más complicada, ya que debido al gálibo del puente de la AP-8, el transporte deberá realizar una maniobra de ida y vuelta por la autopista.

Se incorporará en dirección contraria en la salida que se utiliza para llegar a Oiartzun desde Irun y volverá a la Gi-2134 por la entrada que utilizan los oiartzuarras para dirigirse a Irun. Desde este punto circulará en dirección Gurutze hasta el cruce del Castillo del Inglés para llegar a la subestación. «Pasará por las afueras de Oiartzun», concretó Silvia Pérez, directora foral de Carreteras. Para que pueda circular se han tenido que realizar numerosas intervenciones en el recorrido para retirar o modificar biondas, señales, semáforos, medianas, isletas, etc. El coste de los trabajos corren a cargo del transportista. Durante las dos etapas esas carreteras estarán cerradas.