Urbaser presenta la oferta económica más competitiva para explotar la incineradora

Esta oferta tan competitiva que supone un importante ahorro para el bolsillo del Consorcio de Residuos y, por tanto, de los contribuyentes guipuzcoanos, la haría situarse como la primera clasificada en una reñida final con FCC. La candidatura de Valoriza, perteneciente a Sacyr y que concurre en unión con Construcciones Balzola, socia de Lurgoien, ha realizado la propuesta económica más cara y ha obtenido la peor puntuación técnica. La asamblea de Gipuzkoako Hondakinen Kontsorzioa (GHK) del próximo día 27 aprobará la adjudicación.

La sede del Consorcio en Hernani fue escenario ayer por la mañana del paso más importante en el proceso de adjudicación de la financiación, construcción y explotación de la incineradora de Zubieta, una «solución moderna» para el acuciante problema de la gestión de residuos que arrastra el territorio, según mantienen desde la Diputación. La mesa de contratación dio a conocer la valoración técnica de las propuestas que previamente habían presentado los tres conglomerados que aspiran al contrato y que agrupan a una decena de empresas. La oferta de FCC ha recibido una valoración técnica de 433 puntos, superior a los 407 de Urbaser y los 350 de Valoriza.

Pero el principal interés residía en conocer la propuesta económica de cada UTE, con un peso significativo en la valoración final. La adjudicataria deberá adelantar una cifra estimativa de 217 millones de inversión para construir la planta de Zubieta, que explotará durante 32 años y cinco meses. Y aquí reside unos de los puntos claves, el canon que GHK, la sociedad instrumental del Consorcio de Residuos, pagará anualmente a la UTE vencedora, que según los pliegos de licitación será de un máximo anual de 31,6 millones. Este gasto de explotación comprende dos conceptos: el de mayor peso es el de disponibilidad, que supone el grueso del componente económico, al que hay que sumar la tarifa por tonelada de basura tratada.

Diversas fuentes consultadas destacaron las ofertas económicas realizadas por los dos conglomerados en cabeza, especialmente la de Urbaser, UTE en la que confluyen los intereses de cuatro empresas guipuzcoanas y que presentó una propuesta con una baja «importante» del 25% en el canon global. Así, el principal concepto, el pago por disponibilidad, se reduce a 21.672.069 euros. La propuesta de Urbaser incluye un pago por tonelada tratada en la planta de Tratamiento Mecánico Biológico (TMB) de 3,8 euros, y otra de 11,8 euros por tonelada en la planta de Valorización Energética, la incineradora.

Teniendo en cuenta que la cantidad de toneladas a tratar varía, la cuantía anual que saldría de la Diputación y las mancomunidades para abonar el canon a la adjudicataria, si finalmente resultara ser Urbaser, rondaría unos 24 millones al año. Si se tiene en cuenta que el contrato licitado contempla una explotación privada de 32 años y 5 meses, y realizando una multiplicación básica, el resultado sería de 768 millones. Una cifra que reduce de forma notable los más de mil millones de los que se habló el pasado mes de mayo y que la Diputación confiaba en rebajar. Así será a tenor de las propuestas económicas que se pudieron conocer ayer, unas ofertas que repercutirán en la tarifa de los servicios de residuos y, por ende, en los bolsillos de los guipuzcoanos.

FCC realizó una propuesta de pago por disponibilidad de 23.973.912 euros, y tarifas de 3,31 y 10,76 euros por tonelada de tratamiento de residuos en la planta Tratamiento Mecánico Biológico (TMB) y en de Valorización Energética, respectivamente.

La oferta económica de Valoriza fue la más cara, con 27 millones de pago por disponibilidad, aunque sus tarifas por tratamiento por tonelada de basura son las más económicas: 2,99 euros en la TMB y 9,99 en la incineradora.

A pesar de las elevadas cifras que supone la construcción del llamado Complejo Medioambiental de Gipuzkoa y su explotación en las próximas tres décadas, desde la Diputación han venido asegurando que la puesta en marcha de la incineradora no encarecerá la gestión de residuos. El diputado de Medio Ambiente, José Ignacio Asensio, afirmó que los cuatro años de moratoria del anterior Gobierno foral han dado como resultado «la falta actual de infraestructuras, el encarecimiento de la gestión de los residuos hasta los 38 millones al año y la ausencia de más alternativa que la de los vertederos». De hecho, tras el cierre del de Lapatx, en Azpeitia, la basura guipuzcoana comenzará a ser depositada en 2017 en Tudela y también en Mutiloa, además de en Cantabria, a donde ya viajan 25 camiones diarios.