«Si vienen aquí no se lo vamos a poner fácil»

Su siguiente objetivo ya tiene forma y fecha: del 13 al 19 de julio han organizado una 'frackanpada', un encuentro internacional que reunirá a opositores a la fractura hidráulica en el entorno de Subijana. El enclave no está escogido al azar ya que las tiendas pretenden montarse justo en la zona en la que la Sociedad de Hidrocarburos de Euskadi (Shesa), empresa dependiente del Gobierno Vasco, tiene planeado realizar los dos pozos de prueba para comprobar si en el subsuelo de Álava existe un yacimiento de gas no convencional.

La 'frackanpada' ha sido planteada como un punto de encuentro, «de diversión y formación», pero también «un lugar en el que se propondrán acciones con las que visibilizar la problemática de la fractura hidráulica» y se compartirán «experiencias de resistencia a esta industria». El número de asistentes aún no está confirmado, pero algunas fuentes calculan que podrían ser varios centenares. «Contamos con la complicidad de los vecinos de la zona, que son los que nos van a permitir hacerlo», explican los organizadores. Pese a estar alejados del centro urbano los terrenos de Subijana pertenecen al término municipal de Vitoria, un ayuntamiento que tampoco pondrá pegas ya que se ha declarado abiertamente antifracking pese a estar gobernado por el mismo partido que incentiva la perforación hidráulica desde el Gobierno central.

Los movimientos antifracking también tienen una cita hoy mismo en Las Merindades, zona en la que los primeros sondeos en busca de gas podrían realizarse a lo largo del próximo año. Serían las primeras pruebas de este sistema en toda España. Una cadena humana vestida con chalecos reflectantes se ha dado cita en el polígono industrial de Villasante, a apenas unos kilómetros de la frontera entre el norte de Burgos y Bizkaia, para después marchar hasta Angosto, pequeña localidad en la que está proyectado llevar a cabo uno de los inminentes sondeos. Más allá de visibilizar el rechazo, los organizadores también quieren que la gente conozca la zona «para irnos situando ante movilizaciones reales cuando comiencen las obras».