Unidos Podemos afianza en Euskadi un triunfo agridulce y el PNV resiste el tirón
La coalición de izquierdas sigue capitalizando el voto del «cambio», que no logra recuperar EH Bildu
Jorge Sainz
Lunes, 27 de junio 2016, 09:29
Unidos Podemos mantiene su tirón en la Comunidad Autónoma Vasca en las generales y afianza su victoria de hace seis meses, pero con un sabor agridulce por la derrota de sus compañeros en el resto del Estado. El PNV aguantó el tirón amarrando su grupo parlamentario, mientras EH Bildu sigue con su sangría de votos. El PSE-EE salió satisfecho tras mantener sus tres escaños, mientras que en el PP vasco la sensación fue la opuesta a Unidos Podemos: discreto resultado en Euskadi, pero alegría por la victoria de Mariano Rajoy.
La cara de Nagua Alba fue menos alegre que en diciembre pese a haber dado el sorpasso definitivo al PNV en Euskadi, tanto en votos, cuatro puntos más, como en escaños, con un total de seis. Un triunfo histórico en los tres territorios empañado por el bajón en España. En el País Vasco su victoria se apuntala por una importante bolsa de voto abertzale en clave anti PP, que provoca que la coalición de izquierdas en Euskadi no haya sido arrastrada por la caída de Pablo Iglesias. Unidos Podemos subió un diputado gracias a 1.300 papeletas en Bizkaia que le dieron el último escaño de ese territorio frente al PNV, que se queda con cinco asientos en el global. Esa fue la única variable, ya que en Gipuzkoa y Araba el resultado fue calcado al del 20-D. La participación bajó un punto y medio, hasta un 67,44%.
La coalición de Podemos y Ezker Anitza-IU fue decisiva para la victoria, aunque dos y dos no sumaron cuatro, al cosechar unas 19.000 papeletas menos que hace seis meses por separado. Y volvieron a dejar escapar en Gipuzkoa y Bizkaia tres senadores pese a quedar primeros. Sus electores se olvidaron otra vez de la papeleta sepia, para alegría del PNV. La coalición de izquierdas ha vuelto a capitalizar en Euskadi la idea del «cambio» frente al PP. Habrá que ver si puede mantener esta inercia en las autonómicas de octubre.
Mirando a las autonómicas
El PNV salvó los muebles en una segunda vuelta de las generales todavía más polarizada en clave española que la de diciembre, y se mantiene como favorito para las autonómicas de octubre. Los jeltzales mantuvieron asimismo sus dos escaños en Gipuzkoa. Ahora, intentará hacer valer sus cinco diputados, aunque no sirvan para inclinar la balanza entre el PP y la izquierda.
La formación vasca más feliz anoche fue el PSE-EE, que aguantó sus tres escaños, incluido el de Araba, que parecía otra vez perdido ante Unidos Podemos pero al que se ha agarrado como si les fuera la vida en ello. Lo salvó por 552 votos. En Bizkaia, Patxi López mantuvo el suyo y desmintió a las encuestas, que no hilaron muy fino. Los socialistas subieron incluso en un millar de sufragios y su suelo electoral volvió a aguantar una dura prueba.
El PSE es ahora tercera fuerza por delante de EH Bildu, que amarró sus dos escaños pero perdió 31.000 votos, evidenciando que no ha interiorizado en sus votantes la idea de que la formación independentista puede ser útil en Madrid. En Gipuzkoa anduvo lejos de inquietar al PNV por el segundo diputado. Y en Bizkaia, la candidatura de Oskar Matute, el líder de Alternatiba con un perfil de izquierda no identitaria más parecido al de Podemos, no ha dado resultado. La gente se ha quedado con el original en vez de con la copia. En resumen, que no remonta desde su batacazo en las municipales y forales de mayo de 2015. La formación de Arnaldo Otegi tiene cuatro meses para recuperar en las autonómicas, una vez que desaparezca el factor estatal. El PP vasco se movió en los números esperados y conservó sus dos escaños. Subió en votos pero de forma discreta, sin aportar cualitativamente a la victoria de Rajoy. En Gipuzkoa sigue sin representación. Por último, Ciudadanos no logró ningún asiento.
Si los resultados de anoche se extrapolaran a las elecciones vascas, el resultado sería Unidos Podemos (25), PNV (18), PSE-EE (11) PP (10), EH Bildu (10) y Ciudadanos (1). No obstante, esos comicios autonómicos de octubre poco o nada tedrán que ver con los de anoche. Con esos guarismos, la única mayoría absoluta con opciones reales en el Parlamento Vasco sería PNV-PSE-PP.