Vidal: «La primera impresión que te llevas hoy de una empresa es con su web»

-Quiero una campaña que tenga mucho impacto. ¿Apuesto por el mundo 'off line' u 'on line'?

-El medio 'on line' todavía no ha sustituido al 'off line', pero a través de internet el público objetivo son millones y millones de personas. Para optar a este mismo mercado de manera 'off line' hay que dejarse más dinero. La conclusión es clara: en internet con presupuestos más modestos se pueden alcanzar objetivos mayores.

-Tal vez por este motivo muchas empresas se constituyen actualmente únicamente en el ámbito 'on line'...

-Hay muchos negocios que actualmente se crean únicamente en internet, ya que te permite ahorrar costes y con ello tener un producto más competitivo. No necesitas un local físico, ni tantos trabajadores que encarecen el precio. Eso sí, aquellas personas que opten por esta vía deben hacer un esfuerzo económico para conseguir una web que esté viva, resulte atractiva y difunda el mensaje adecuado. Al fin y al cabo, en internet coexisten miles de competidores que venden tu mismo producto y hay que preguntarse y estudiar bien por qué los clientes te van a comprar a ti y no a los otros. Con las ideas claras, las redes sociales pueden resultar útiles para trasladar el mensajes a los clientes.

-En este sentido, ¿qué ventajas ofrecen herramientas como Facebook o Twitter?

-Han permitido una democratización; es decir, que más gente tenga acceso a un amplio mercado. Ahora, campañas de publicidad con pocos medios, pero en las que el mensaje está claro, pueden tener la misma repercusión a las que antes únicamente tenían acceso las grandes empresas a través de periódicos, radios o televisores.

-También hay empresas que no quieren saber nada de internet...

-Algunos clientes no le dan la importancia que deberían y tenemos un trabajo de educación. Hay que hacerles entender que si ahora no estás en internet en dos años van a desaparecer, porque lo primero que hoy en día se hace para conocer o informarse sobre una empresa o una persona es consultar en Google para ver qué resultados obtengo en esa búsqueda. La primera impresión, generalmente, es a través de su web.

-¿Cómo tiene que ser una buena página web?

-En esta misión primero hay que hacer un análisis previo del cliente para saber a qué se dedica y qué necesita, así como conocer su público objetivo. A partir de aquí las características varían dependiendo del producto. Pero hay algo que tiene que destacar en todas: una web debe ser sociable. Hay que dar facilidades para que cualquier persona pueda hacerte el trabajo de compartir con sus contactos tu empresa; es decir, tu producto. Para ello, tienes que desarrollar algo que resulte interesante y llame la atención.

-Una opción es impactar a través de imágenes. ¿Ustedes tienen un servicio muy completo en este ámbito?

-Un producto tiene que ser visual y en Lombok Design contamos con diferentes alternativas. Las fotografías volumétricas permiten ver el artículo en 360º para conocerlo desde todos los ángulos. Es casi como ir a la tienda. Otra solución pasa por las imágenes en 3D, con las que se alcanza un hiperrealismo, ya que permiten percatarte de detalles, como las texturas, como si estuvieras viéndolas en directo. Finalmente, están las fotografías de estudio o de exteriores, pero se usan menos.

-La empresa tiene como eslogan 'Where good ideas are created' (Donde se crean las buenas ideas). ¿A qué se debe?

-Nosotros nos reunimos con un cliente que te cuenta sus necesidades. A partir de aquí, empezamos a pensar sobre ello y comienza una batalla interna sobre lo que opina cada uno del equipo. En este proceso, creamos de la nada una idea, y le entregamos al cliente algo que antes no existía.

-Para ello se necesitan trabajadores motivados...

-Trato que todos se sientan parte integrante de la empresa, ya que el trabajo de todos es necesario para que los clientes tengan un buen concepto de nosotros. Por ello, les estoy agradecido. Por otro lado, he querido aplicar con ellos lo que a mí no me ha gustado en mis experiencias laborales anteriores. Hay flexibilidad en los horarios: cada uno sabe cuándo tiene que entregar el trabajo, y si no lo hace ahora, pues ya lo hará luego. También me gusta que cada uno sepa cuál es su función y no tenga que estar detrás de ello.

-Son una empresa pequeña, ¿qué ventajas tiene?

-El trato con el cliente resulta más cercano y saben, en todo momento, con quién están tratando, ponen cara a todos los miembros del equipo. Por otro lado, no disponemos de cientos de clientes, por lo que los que tenemos los conocemos bien. Eso nos permite pensar en qué más podríamos hacer por ellos.

-¿Cómo les ha afectado la crisis?

-La gente no valora lo que realmente cuesta hacer las cosas. La crisis ha servido de excusa para que muchos, con necesidad o algunos sin ella, te empiecen a apretar. Con el pretexto de 'este año es malo', hay clientes que te piden ajustar presupuestos. Además, las empresas donde primero han empezado a recortar es en el área de comunicación o marketing. Esto nos llevó a reinventarnos y a introducirnos en el mundo 'on line'.

-El nombre de la empresa coincide con el de una isla de Indonesia, ¿es porque tiene algún vínculo con ella?

-No. Ni siquiera he estado. Pero sí algunos miembros de la empresa que practican surf. A mí, particularmente, me gusta este nombre, porque es corto y conciso. Cuando cumplamos el décimo aniversario tenemos la intención de hacer un viaje a esa isla.

-En el día a día, ¿es capaz de desconectar?

-Me cuesta, no soy mucho de desconectar, porque vivo mucho lo que hago. De todas formas, me apasiona ir al mar a pescar.