«Aunque la brecha se reduzca, en todas las crisis se producen retrocesos en la igualdad de la mujer»

- ¿Las cosas son como aparentan y el sexo femenino sale reforzado de la crisis en el mercado laboral?

- Es cierto que la brecha que separa la tasa de actividad entre hombres y mujeres se ha reducido, pero no se debe tanto a la mejora de su situación como a que la destrucción de empleo se ha producido sobre todo en sectores ocupados por varones, como la construcción o la industria. Y aunque esa diferencia se ha reducido durante la crisis económica, aún existen más de once puntos de ventaja.

- ¿A qué atribuye la mayor precariedad laboral que afecta a las mujeres? ¿Es el signo de los nuevos tiempos?

- La conciliación de la vida laboral y familiar es la principal causa de que un elevado porcentaje de ellas trabaje a tiempo parcial, en empleos que además están peor remunerados. Este hecho, además, tiene consecuencias futuras de cara al reconocimiento de derechos como los del desempleo y de pensión, con prestaciones más bajas. Por ello tenemos que seguir trabajando para que las mujeres sigan mejorando sus condiciones laborales, ya que es fundamental para conseguir la igualdad que logren la autonomía económica. Por otra parte, se debe insistir en la corresponsabilidad en el reparto del trabajo del hogar para corregir esa situación histórica de elevado empleo femenino a tiempo parcial. De esta forma se mejoraría también una situación de discriminación que coarta la carrera profesional de las mujeres.

- ¿Las medidas de discriminación positiva deben mantenerse a largo plazo para una igualdad efectiva?

- Debemos felicitarnos por la mayor presencia de la mujer en el mercado laboral, pero aún estamos lejos de haber llegado a una situación de igualdad. La persistencia de una brecha en la tasa de actividad es una muestra de que queda mucho por avanzar.

- ¿Qué propone hacer con las jóvenes menores de 25 años con tasas de paro cercanas al 40%, notablemente superiores a las de los varones?

- Es una irresponsabilidad no aprovechar todo ese talento de una generación que tiene más formación que ninguna otra. Pesa en esa situación la expectativa de la maternidad y que por esta causa desde el ámbito empresarial se las vea más como futuras madres y como un problema que como profesionales. Es clave cambiar la mentalidad y aprovechar las capacidades profesionales de estas mujeres.

- ¿Cómo ha influido la crisis en la situación laboral de las mujeres en Euskadi?

- Las personas expertas dicen que en todas las crisis económicas se producen retrocesos generales en la situación de igualdad. En este caso, al haber perdido el empleo más varones que mujeres, muchas familias dependen en exclusiva de ellas para sostener económicamente el hogar, con la circunstancia añadida de que por lo común realizan más trabajo en casa que los hombres. Por otro lado, la situación económica tan difícil produce a menudo en las mujeres miedo a ejercer derechos laborales de conciliación familiar. Por ello es necesario prestar una especial atención para que no se produzca una rebaja de garantías.