Julen Irizar se estrena con una escapada en la Vuelta a Burgos

Su escapada, de 147 kilómetros, concluyó a siete de la línea de meta. Julen Irizar protagonizó un bonito y prometedor estreno que recordará siempre. Incluso, lo intentó en solitario cuando el pelotón se echó encima del grupo cabecero. Una vez cazado, terminó en el seno del gran grupo.

Neutralizada la fuga, un sprint de potencia en las calles de Melgar de Fernamental resolvió la victoria de etapa, que fue a manos del holandés Danny van Poppel (Sky), víctima de una caída en el transcurso de la jornada. Cruzó la línea de meta con jirones en el maillot y numerosos rasguños que no le impidieron superar con autoridad a Drucker y Meersman, para el que Etixx trabajó a fondo en el tramo final.

«He salido el primero de la última curva y, aunque sabía que todavía estaba muy lejos, he ido a tope y he conseguido vencer», relató el hijo del velocista Jean Paul Van Poppel, ganador de nueve etapas en el Tour, cuatro en el Giro y siete en la Vuelta entre 1986 y 1994.

Respecto a la caída explicó que «realmente me he hecho mucho daño, pero el equipo ha trabajado muy bien para mí. Normalmente no tengo muchas oportunidades y hoy he podido aprovecharla».

Del Bidasoa, al Lampre

El equipo Lampre ha incorporado a tres jóvenes ciclistas procedentes del Colpack en calidad de stagiaires. Dos de ellos participaron en la última edición de la Vuelta al Bidasoa sub 23. Uno de ellos es Edward Ravasi, ganador de la primera etapa y segundo en la general final. El otro, Oliviaro Troya, vencedor en Orio. Completa el trío Fausto Masnada. Los tres son italianos.

Por otro lado, Lars Boom regresará la próxima temporada a Holanda, al Lotto-Jumbo, después de dos años en el Astana sin alcanzar los resultados y el rendimiento que cabía esperar de este excelente rodador de 30 años. Vuelve a una estructura para la que corrió en su día. Boom fue además campeón del Mundo de ciclo cross en 2008 en Treviso.