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FELIX IBARGUTXI
Sábado, 10 de junio 2017, 10:20
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La editorial Erein presentó ayer dos novedades de su colección de novela negra 'Cosecha roja': la quinta entrega de la serie de Jon Arretxe que tiene a Touré como personaje central, y la segunda novela de Javier Sagastiberri. Son los ejemplares número 23 y 24 de la colección, que nació en 2009.
'Piel de topo' es la quinta novela con las andanzas de Touré, un hombre nacido en Burkina Faso que hace bastantes años se afincó en el barrio bilbaíno de San Francisco, trabajando primero como vidente, más tarde dedicado a tareas de detective 'sui generis'. «Cuando parecía que ya se estaba librando de los 'marrones', vuelve a caer en desgracia. Está atrapado por un policía perverso, el que controla las cámaras del barrio. También está pillada Cristina, su amante blanca», dijo el veterano escritor Jon Arretxe en la presentación de ayer.
El anterior libro, 'Juegos de cloaca', transcurría sobre todo en el continente africano. Ahora Touré ha regresado a Bilbao y recuperado algunas de sus relaciones anteriores -Sa Kené, Osmán, Aliou, Xihab- con la finalidad de recomponer su maltrecha existencia. Vive una dura realidad, la de los sin papeles en el paraíso soñado. «Empezó como un negro simpático, pero con el paso del tiempo, y coaccionado por el policía, acabará haciendo de sicario. La duda es si se podrá librar de esa tela de araña. Touré y sus compañeros tratarán por todos los medios de liberarse de esta red de chantaje y extorsión en la que están atrapados», prosiguió Arretxe. La portada del libro juega también con esa metáfora de la tela de araña.
Por otra parte, 'Perversidad' es la segunda novela de Javier Sagastiberri, un donostiarra afincado en Bilbao, que trabaja como inspector de Hacienda. La narración arranca con la escena de un cadáver salvajemente torturado, que aparece una mañana de primavera en la playa de Azkorri. No se trata de una víctima cualquiera, ya que viste el uniforme de los marines norteamericanos. Pero nada es lo que parece, en realidad el muerto es un miembro de una familia de Neguri, que ha salido hace tres años del armario. La investigación del asesinato embarcará a Itziar Elcoro y a su compañera Arantza Rentería en un peligroso viaje que se inicia en Neguri y que termina de forma sorprendente en un siniestro chalet de Plentzia. Allí, los monstruos se arrancarán su máscara e Itziar Elcoro sufrirá una de las experiencias más perturbadoras de toda su carrera en la Ertzaintza.
En su primera novela, 'El asesino de reinas', Sagastiberri creó estas dos protagonistas ertzainas. «Una es la típica pija de San Sebastián. La otra, Arantza Rentería, tiene la estética de la izquierda abertzale, y es más agresiva en sus modales», dijo ayer el escritor. Si en la primera novela había un negurítico que poseía un prostíbulo de lujo, en esta segunda entrega aparece un cabaret gay, que tiene que ver con la víctima, y quien a su vez pertenecía a una familia próxima al Opus Dei.
Las ertzainas Elcoro y Rentería comienzan sus pesquisas en la comunidad gay. Pero pronto llegan a la conclusión de que el crimen puede estar más bien relacionado con el dinero. Sagastiberri introduce en la novela el tema de la troncalidad, un sistema que prevalece en Bizkaia y que hace que los caseríos se hereden de manera diferente a como ocurre en Gipuzkoa. Según confesó Sagastiberri, es posible que la tercera novela discurra en Gipuzkoa, «porque la ertzaina Rentería es originaria del Goierri».
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