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Hollande piensa que los mensajes que le escriben sus conciudadanos son un buen termómetro de la situación de su país.
«Señor presidente: encuéntreme  un marido»

«Señor presidente: encuéntreme un marido»

Hollande recibe todos los días 800 cartas de sus conciudadanos. Un libro saca a la luz la correspondencia 'privada' del inquilino del Elíseo

ESTHER RODRIGO

Martes, 6 de mayo 2014, 21:50

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Señor presidente: es mi madre la que me ha empujado a escribirle. Ella está desesperada porque tengo 38 años y soy soltera. Está convencida de que, dada la gran cantidad de personas que usted conoce, mi marido debería estar estadísticamente entre ellas. Le ruego que haga lo posible por encontrarlo y hacérmelo saber». El texto forma parte de una de las cartas que recibe todos los días el presidente de Francia, François Hollande. Un libro redactado por la periodista Sandrine Campese que se editará esta semana en el país vecino saca a la luz los entresijos de la correspondencia 'privada' que el inquilino del Palacio del Elíseo mantiene con todos sus conciudadanos que se deciden a escribirle.

Hollande otorga gran importancia a ese intercambio de mensajes. Prueba de ello es que tiene un equipo de 73 personas que conforma el Departamento de la Correspondencia Presidencial que se encarga de revisar y catalogar las cartas y correos electrónicos que recibe. No es una labor baladí, pues cada día llegan entre 800 y 1.000 mensajes. El presidente se ha propuesto que todos ellos reciban una respuesta en un plazo inferior a las 48 horas.

Esterilizar gatos

A la par que cuenta cómo funciona el departamento de correspondencia, el libro recoge una muestra de las cartas que llegan al Elíseo. Como es de esperar, las hay para todos los gustos. Una conciudadana, por ejemplo, le implora que emprenda una campaña de esterilización de los gatos en un distrito parisino dada su prodigiosa multiplicación. «No me entienda mal, no deseo ningún daño a los gatos, pero hay tantos que representan una amenaza para todos», aclara. Las disputas vecinales también tienen cabida: «La joven pareja que se trasladó la semana pasada al piso superior tiene la costumbre de copular entre la medianoche y las dos de la mañana, lo que hace que mi perro se enfade y se ponga a ladrar», se queja uno de los escribientes. Hay quien reclama la Legión de Honor por acabar un maratón e incluso quien le alerta de los riesgos geoestratégicos que acechan a Francia porque Rusia «se está preparando para atacarnos». Las demandas más comunes, como es previsible, están relacionadas con las cuantías de las pensiones.

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