El bar Txindoki será protagonista esta tarde en el inicio de los Santacruces

El pregón se escuchará esta tarde, a las 19.30 horas, desde el balcón de una de las viviendas de la casa Zubi Aurre. Allí estarán Maxus, Andoni y Patxi, éste último acompañado por su mujer Pati Dorronsoro. Solo faltará Mikel, el más pequeño de los hermanos, que reside en Vitoria desde hace años.

Maxus será la encargada de leer el pregón. Recordará en su discurso a sus padres Miguel, nacido en Amezketa, y a su madre, Engraxi, natural de Betelu. El matrimonio inició su vida en común en Elorrio, donde Miguel, panadero de profesión, encontró trabajo. «Mi madre no se hacía a la vida en Elorrio y pidió a mi abuela que buscara un local en Andoain para abrir un bar. Gracas a las gestiones de la familia Garralda-Arin se localizó una caballería en la casa Pujantenea de la calle Mayor. En mayo de 1946 el matrimonio se traslada a vivir a Andoain y en julio de ese mismo año, acondicionado ya el local, se abre al público el bar Txindoki.

Miguel y Engraxi se mantuvieron al frente del negocio hasta 1993, año en el que se jubilaron. A partir de esa fecha y hasta 2003, Mikel, el más pequeño de los hijos, se hace cargo del bar con el apoyo de sus hermanos. Tras su traslado por motivos laborales a Gazteiz, serán Patxi y su mujer Pati Dorronsoro quienes asumen las riendas y dan un nuevo aire al negocio introduciendo en la carta platos típicos de Méjico, país de origen de Pati.

La etapa de la familia en el Txindoki se cierra en 2013 con la venta del establecimiento a José Amaro. «Tengo claro que esta tarde aprovecharé la ocasión que nos da la comisión de fiestas para agradecerles nuestra elección como pregoneros. También queremos hacer un agradecimiento al pueblo de Andoain, a quienes han trabajado con nosotros en el bar y a todos aquellos que han colaborado en todos estos años», señala Maxus.

Nueva etapa en el Txindoki

«Somos un equipo con Iker y Sonia en la cocina e Imanol y Cristian en la barra», indica José Amaro, propietario del Txindoki desde 2013.

Esta tarde compartirá protagonismo con los hermanos Elosegi, a quienes mencionará en su pregón «porque ellos son y serán siempre parte del Txindoki. Nosotros practicamente acabamos de llegar, por eso quiero darles las gracias por dejarnos seguir con el legado», indica.

Sorprendido pero ilusionado por la elección, 'Urruti' señala que «el Txindoki lleva 60 años celebrando estas fiestas y se merecía este reconocimiento. Espero que dure como poco otros 60 años más», añade.