La obra del bidegorri entre Donostia y Lasarte-Oria ya está en marcha

«El bidegorri permitirá superar esta situación de incomunicación y, por tanto, los valoramos como un gran paso», aseguran miembros de Eguski, quienes, «como hemos manifestado en más de una ocasión, consideramos que la conexión entre Lasarte y Donostia debería ir más allá de un bidegorri. En concreto, hemos solicitado que se estudie la posibilidad de que la bulevarización de Añorga, en principio prevista hasta la rotonda de Lore Toki, se prolongue de alguna manera hasta Lasarte. Asimismo, constatamos que Lasarte no tiene solo problemas de comunicación peatonal y ciclista con Donostia, sino prácticamente con todos los municipios circunvecinos, especialmente con Andoain y Usurbil, y que la subsanación de esas carencias también deben ser motivo de estudio.

Características del bidegorri

El nuevo bidegorri contará con 1.230 metros de longitud y cuatro de anchura, dos para los ciclistas y otros dos para los peatones. Arrancará a la altura de la rotonda de Lore Toki (el actual bidegorri que llega de Donostia se corta más o menos en ese punto, en la estación de tren de Errekalde) y ocupará en sus primeros metros un carril de la calzada, pero enseguida se internará en el viejo tramo del ferrocarril que ha quedado libre después del reciente desdoblamiento de la línea que ha hecho Eusko Tren en ese punto. De hecho, el bidegorri atravesará dos viejos túneles ferroviarios de 80 y 160 metros de longitud, respectivamente. También atravesará la erreka Añorga, para lo que será preciso construir un puente de diez metros de luz. El bidegorri desembocará ya en Lasarte-Oria, en el parque de Urbarte, muy cerca del hipermercado Urbil. Esa es precisamente la parte que muestra la fotografía que se adjunta. El edificio del fondo es Urbil.

En agosto, cuando salió la obra a licitación, el presupuesto estimado rondaba los 900.000 euros. Lo cierto es que ya antes de esta legislatura existía un proyecto de bidegorri, pero con un trazado más largo (de Errekalde se desviaba en dirección a Belartza), con pendientes muy superiores y mucho más caro. El nuevo, en cambio, aprovecha el tramo de vía que Eusko Tren ha liberado recientemente en la zona, lo que permite un trazado más corto y directo, más cómodo (es prácticamente llano) y mucho más barato.