Sonia Archeli, Tiradora del Badaiotz de Vitoria de sokatira: «La sokatira es un deporte que requiere mucha técnica, es difícil hacerlo bien»

-Ha estado en China en el Campeonato del Mundo, ¿puede contarnos cómo lo ha vivido?

-En el Mundial celebrado en Xouzhou (China) mi club Badaiotz ha conseguido tres medallas: plata en 500 por clubes, bronce en 540 como selección de Euskadi y bronce en 500 como selección de Euskadi. Hay que destacar que en ambos pódium el equipo quedó por detrás de la selección de China y Taiwan, países en los que la sokatira es profesional. Nos medimos con mujeres que entrenan seis horas diarias, que tienen recursos y medios de entrenamiento con los que nosotras no contamos y que dedican prácticamente todo su tiempo y energía al entreno y a la competición. En el caso de Badaiotz todas trabajamos, muchas somos madres y tenemos que compaginar nuestra vida laboral y estudios con la familiar y la deportiva. Debemos solicitar permisos especiales o gastar nuestras vacaciones para poder acudir a citas como la de la pasada semana, económicamente el club se sostiene con exhibiciones de sokatira y herri kirolak que vamos haciendo a lo largo del año para poder pagar material, zapatillas, camisetas, o el alquiler de la cancha en la que entrenamos en Abetxuko. Este año la Diputación de Alava nos ha dado una pequeña ayuda y ahora, posterior al mundial, podemos solicitar subvenciones que nos ayuden a sufragar los gastos, gastos que se han adelantado y que parte de ellos hemos pagado cada una de nosotras.

-¿Cómo surgió su afición a esta modalidad deportiva?

-Siempre he practicado deporte, mi deporte inicial fue la natación al que dedique seis años y en el que conseguí varias medallas en campeonatos de Gipuzkoa y Euskadi. Después practiqué diferentes deportes pero sin competir. Comencé a practicar sokatira hace un año en el club Badaiotz de Vitoria. Una compañera de trabajo, Garbiñe, es la zaguera del equipo, el año pasado me invitó a probar, me comentó que había varias chicas que iban a empezar a probar y que si me apetecía era un buen momento. Así que me animé y el viernes 10 de marzo del año pasado puse por primera vez mis manos sobre la soka. Las sensaciones fueron extrañas ya que no había hecho nunca nada parecido, lo más parecido, el juego de soka que hacíamos en el colegio, y te puedo asegurar que no tiene nada que ver. Me acerqué a este mundo por curiosidad y me ha enganchado. Mediante la soka estoy aprendiendo a trabajar aspectos como el autocontrol, la frustración, trabajo en equipo y me ha quedado claro que da igual que seas muy bueno en otro deporte, la soka te exigirá más ya que no es solo cuestión de fuerza o resistencia.

-¡Qué curioso!

-La sokatira es un deporte que requiere mucha técnica, es complicado hacerlo bien. Los expertos dicen que hacen falta entre dos y tres años de entrenamiento para que puedas estar 'cómodo' enganchado a la soga. Es un deporte de equipo en el que todas y cada una de sus componentes son importantes, tanto las que están en la cuerda como las que están fuera, haciendo apoyo logístico y en muchas ocasiones emocional al resto de sus compañeras. Importantísima la función del entrenador que programa las sesiones en función de los objetivos a conseguir, que apoya y anima a las tiradoras y que hace un croquis en su cabeza sabiendo los pesos de cada una para componer la mejor formación de cara a cada campeonato.

-A tenor de sus palabras se deduce que es un deporte muy, muy de grupo, sin figuras, diría que de precisión.

-En la soka nos une un vínculo especial que continúa fuera de ella, Badaiotz es como una familia en la que todos los miembros tienen su función. Es muy importante la confianza en las demás ya que dependemos unas de otras. Cuando una está mal colocada, ha perdido la cuerda de la cintura o se cae, las demás compañeras se recolocan para que ésta pueda volver a situarse y seguir tirando, todo esto en cuestión de segundos. Es un deporte muy intuitivo en el que no sólo tienes que tener en cuenta los envites del contrario sino que tienes que sentir a tu equipo. Las tiradoras que están en los primeros puestos no ven a las demás. Por lo que es muy importante que se hable y que la voz del entrenador sea la que guíe las tiradas. Marcamos el paso a ritmo de 'hotz hetz'...para que todas vayamos a la vez. Tenemos que intentar que los pasos sean similares para parecer una en vez de ocho, la sincronización es muy importante.

-Habla en clave de colectivo, ¿nos puede desgranar cómo es el club Badaiotz?

-Badaiotz es un club de sokatira alavés que tiene un recorrido importante dentro de este mundo. Seis mundiales ganados y otros tantos en segundos puestos. A estos éxitos anteriores debemos unir los conseguidos este año, la Txapelketa de Euskadi tanto en peso grande 540, como en pequeño 500, lo que dio al club la posibilidad de representar a Euskadi como selección en el mundial por naciones.

-Para llegar hasta dónde ha llegado suponemos que hay que entrenar mucho, ¿no?

-Nos juntamos para entrenar específico tres días a la semana, aunque a este entreno hay que sumarle el entreno físico que cada una debe realizar por su cuenta. Así que entrenamos diariamente, si no es de una forma, es de otra. Una de las componentes del equipo es la preparadora física y nos dirige y orienta para realizar la puesta a punto física. En mi caso me ayudo de entrenamientos funcionales de Crossfit en CF-Eibar. Es importante la dieta, ya que cada una de las tiradoras debe estar dentro de unos pesos para que la suma total esté en el peso justo de la categoría, por lo que los meses de temporada se hacen duros tanto por los entrenos, la dieta y la presión, pero cuando llegan estos logros y ves la cara de tus compañeras, del entrenador, de los amigos y los familiares que han estado apoyándonos todo el tiempo, solo queda lo bueno.

-¿A quién dedicas estos éxitos logrados no sin un gran esfuerzo?

-Creo que puedo hablar en nombre de todas mis compañeras cuando digo que las medallas conseguidas se las dedicamos a nuestras familias y amigos más cercanos ya que sin su apoyo incondicional todo esto no sería posible. En mi caso quiero agradecer al resto de mis compañeras por los ánimos, el cariño, la compresión y la fuerza transmitida. Darles las gracias por dejarme ser partícipe de todo esto y formar parte de la familia Badaiotz.

-¿Qué les diría a las chicas que quieran practicar este deporte o están en duda?

-A las chicas que quieran animarse a practicar sokatira les diría que es una buena oportunidad para trabajar muchas facetas, tanto físicas como emocionales. La soka va a exigir lo máximo de ti, en cuanto a técnica y fuerza, pero también te ayudará a trabajar aspectos como el compañerismo, el trabajo en equipo y las relaciones interpersonales. Es una pena que cerca de Eibar no contemos con ningún equipo de sokatira en goma para que la gente de la zona pueda practicar pero si realmente se quiere, se puede. En Badaiotz estamos once tiradoras en este momento y somos de diferentes puntos, hay alavesas, vizcaínas, una de ellas de Ermua, gipuzcoanas y navarras, así que todas debemos desplazarnos para los entrenamientos.

-¿Qué podría hacerse para promocionar?

-Sería interesante que se hiciera como en Navarra, donde el deporte escolar engloba disciplinas alternativas como la sokatira, saliéndose de las ofertas deportivas habituales como son el fútbol o el balonmano. De esta forma se darían a conocer otro tipo de deportes y opciones a los niños y niñas de practicar otras disciplinas.

-¿Quiénes componen su equipo del Badaiotz?

-Susana Sánchez, Ruth Linaza, Amaia Leiza, Sonia Archeli, Eva González de Matauco, Lorea Rojo, Arrate Chillon, Jone Uhalde, Maider Etxezabal, Ruth Cayero y Garbiñe López de Uralde a las órdenes de Ion Lapazaran, somos la familia que componemos Badaiotz a día de hoy, nos encontramos en tiempo de descanso, aunque en abril y mayo tomaremos parte en la competición interpueblos en Alava, donde esperamos volver a dar lo mejor de nosotras.