La hostelería, en favor del agua del grifo

A partir del ofrecimiento de Ekogunea al Ayuntamiento de Eibar de sumarse a este plan, los grupos municipales del PSE e Irabazi suscribieron una moción en la que instaban al Ayuntamiento a apoyar «la labor que está efectuando el Gobierno municipal en aras de realizar una campaña de divulgación con el objetivo de dar a conocer los beneficios que produce la disminución de botellas de agua y el consumo del agua del grifo».

La campaña incluirá la adquisición de jarras de agua serigrafiadas con los motivos de la propia campaña, el plan de comunicación, difusión y publicidad, y la distribución del material. El presupuesto de la campaña se eleva a 10.928,56 euros, de los que 8.923,23 serán aportados por Kutxa Ekogunea y el resto, es decir, 2.005,23 euros, por el Ayuntamiento de Eibar.

Los destinatarios de la campaña son el sector hostelero (restaurantes, bares, hoteles), las instalaciones donde se organicen actos (centros culturales, colegios, empresas) y la ciudadanía en general, para incidir en ellos como consumidores de agua fuera de casa, e indirectamente, para su consumo en casa. En el caso de la hostelería, los diferentes establecimientos eibarreses serán invitados a participar en la campaña. La cifra de establecimientos que podrían participar, según las estimaciones municipales, se sitúa en la treintena.

Además, y en base a la moción que aprobaron PSE e Irabazi, se propone que, en todos los actos organizados por el propio Ayuntamiento, se sirva agua del grifo en jarras. Y se insta, asimismo, a que en todos los centros cívicos e instalaciones municipales donde se puedan realizar conferencias, mesas redondas, encuentros y eventos de este tipo, exista la posibilidad de utilizar jarras y vasos para servir agua del grifo.

Entre los argumentos a favor del agua mineral, señalan los impulsores de la campaña, habitualmente se mencionan su mayor seguridad, salubridad y mejor sabor. «Sabemos que esos argumentos no tienen cabida en el caso del agua del grifo de Gipuzkoa y, además, la huella ecológica del agua mineral es significativamente mayor, especialmente en lo que respecta a su envoltura y transporte».

Así, y mediante esta campaña, se quiere trasladar un triple mensaje: que el agua de Gipuzkoa es de gran calidad, que el uso de botellas de plástico requiere consumo energético para su producción, transporte y residuos que se deben gestionar, y que fuera de casa también se puede ofrecer o pedir agua del grifo.

Asimismo, se debe tener en cuenta que a nivel mundial se utilizan 2,7 millones de toneladas de plástico para embotellar agua, y gran cantidad de esos recipientes se tiran directamente a la basura, reciclándose solamente el 20%. Además, una botella de plástico puede tardar hasta 1.000 años en biodegradarse.